Cambio al frente de Almirall. Carlos Gallardo Piqué, tercera generación de la familia al frente a la farmacéutica del IBEX 35, tomará el volante de mandos a partir de mayo.
El mercado ha recibido la noticia entre compras y buenas sensaciones, pero ¿quién es la figura que se esconde detrás del hijo del veterano empresario, Jorge Gallardo?
Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:
Jorge Gallardo, hasta ahora presidente de la farmacéutica, ha anunciado sus intenciones de abandonar la primera fila del IBEX 35, ¿y ahora qué?
Barcelona, 20 de junio de 1908.
Antonio Gallardo, el primero de la prolífica familia de empresarios farmacéuticos, llega al mundo empresario formado en la escuela de Comercio de Barcelona dio sus primeros pasos laborales entre las filas y pasillos de la Compañía Aeropostal, el germen de Air France.
Allí estuvo entre aviones y baguettes durante más de 25 años por los que pasó por todos los cargos hasta convertirse en el Delegado Regional de la aerolínea de bandera del Gobierno francés. Diez años después, en 1943, Antonio Gallardo Carrera fuera el laboratorio farmacéutico Almirall de la mano de Víctor Almirall.
Con el tiempo, sus hijos, Antonio y Jorge Gallardo Ballart, se unen a la empresa y años más tarde, tras el fallecimiento de su padre, toman las riendas del negocio y preparan a los seis miembros de la tercera generación para tomar las riendas de los asuntos familiares y empresariales, poniendo los pilares del Grupo Familiar Gallardo.
Pasaron los años y en 1987, Almirall se convertía en la empresa líder del sector al que los Gallardo habían ligado su vida, la farmacia. En 1988, fallecido Antonio Gallardo padre, Jorge y su hermano Antonio, hijo, asumen las riendas del negocio cuyo crecimiento aceleran hasta el anuncio, en 1997, de la fusión con Prodesfarma.
Aterrizaje en el mercado
El nacimiento de un “nuevo día”, como se calificó. El arranque de una nueva historia que la llevaría a lo más alto con su salida a bolsa en 2007 donde, poco a poco, fueron escalando posiciones hasta, el pasado mes de junio, aterrizar en el IBEX 35.
Almirall es una historia con más luces que sombras, con 36 años a sus espaldas del fármaco que no falta en ningún dispensario casero el Almax, el antiácido que, a pesar de ser el más conocido, no es el único de la firma.
También está el antiestamínico Ebastel o el antimigrañoso Almográn. Revolucionarias, además, han sido sus aportaciones a los tratamientos para combatir afecciones de la piel, como Aczone, Seysara o el primer medicamento biológico utilizado en España contra la psoriasis, el Ilumetri.
De Almirall fue el primer farmacéutico español de I+D aprobado por la FDA en Estados Unidos. El antimigrañoso, Almotriptán.
En 2013, confiada por su posición, Almirall cerraba la compra de Aqua Pharmaceuticals lo que le enseñó la puerta de entrada al mayor mercado dermatológico del mundo. La familia Gallardo son hoy una de las familias más ricas del mundo.
Se les estima un patrimonio de casi 3.000 millones de euros, un 41,1% invertido en el mercado a través no solo de Almirall sino también en la inversión en otras firmas como la cadena de hospitales privados, Vithas, Goodgrower o el Grupo Plafín.
En 2020 Almirall unió a su catálogo Sativex, un fármaco utilizado para tratar la esclerosis múltiple que usa derivados del cannabis. En este contexto, la firma ha perdido casi 41 millones de euros en el trimestre. Y en bolsa rebota.
El IBEX rejuvenece
Aunque las razones quedan por el relevo en la cúpula. Con 80 años, Jorge Gallardo cede la presidencia de la firma y con Antonio fuera de combate desde 2014, Carlos Gallardo, su hijo, junto con su primo Antonio, a partir del próximo 6 de mayo, cuando se celebra la Junta de Accionistas de la cotizada, tomará el relevo en la firma.
Licenciado en Ingeniería Industrial por la Universidad Politècnica de Catalunya y MBA por la Universidad de Stanford, ha ocupado posiciones directivas en Pfizer y también en la propia compañía familia donde fue director general de su filial para Reino Unido en Irlanda.
Ahora la presidencia, dice Carlos, en un comunicado, es un “reto estimulante” que se le pone por delante a quien en 2018 se le nombrara vicepresidente segundo de una cotizada sin límites sobre un parqué que, poco a poco, se rejuvenece. Primero quedó Marta Ortega al frente a Inditex y ahora Carlos Gallardo sienta las bases de la nueva clase empresarial del mercado español.