La economía de Arabia Saudí sigue en desaceleración, así lo ha reflejado el último informe que acaba de publicar la empresa de seguros Crédito y Caución. Tras la crisis que sufrió el país en 2017, la situación económica no parece volver a encarrilarse y se espera que hasta dentro de unos años no ocurra.
Pavel Gómez del Castillo, Responsable de Comunicación de la empresa Crédito y Caución, afirma que lo que más llama la atención de este estudio es el alto nivel de impago que viene sucediendo desde mediados del año. Reconoce que es un periodo algo complicado y que será difícil conseguir esta recuperación, que no espera que suceda ni este año ni el siguiente.
Arabia Saudí está inmersa en un proyecto a 15 años para llevar a cabo una reforma estructural de su actividad económica y su menor dependencia en el petróleo. “Se quiere dar un mayor protagonismo a las empresas privadas, por un lado se pondrá en marcha un plan de estímulo en vivienda y turismo pero por otra parte la reserva fiscal es muy austera y ha hecho que haya un menor crecimiento de los ingresos".
Los principales afectados de esta situación son las empresas del sector privado, ya que se ven muy presionadas por esta caída de la demanda interna y por consecuencia, el crecimiento empresarial y los márgenes se ven modificados a la baja, generando así tensiones en los niveles de impago.
Uno de los objetivos principales de este plan de estímulo tiene que ver con los saudíes y su empleo en el sector privado. Actualmente, solo un 19% de ellos trabaja en estas empresas, y el resto son extranjeros. Esto provoca que la mayoría de ellos abandonen el país y la desaceleración económica se incremente. Por ello, el responsable de comunicación de Crédito y Caución asegura que esto, junto a otras medidas que favorezcan la economía del país, es algo que hay que empezar a cambiar lo antes posible para que Arabia Saudí consiga recuperarse de nuevo.