Atención, pequeño empresario: si sacas a un solo empleado del ERTE por fuerza mayor, empezarás a pagar la Seguridad Social del resto de trabajadores, incluso de los que todavía están dentro del ERTE. Es la medida que recoge el Real Decreto-ley del 12 de marzo que extiende estos expedientes hasta el 30 de junio.
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Mientras la fase 1 ya ha muerto en España -al menos, de momento- muchos comercios pueden empezar a abrir y con mucha más flexibilidad respecto a sus ERTEs gracias a los llamados ERTEs por fuerza mayor parcial, con los que pueden empezar a "sacar" a varios empleados y mantener al resto dentro. Sin embargo, ¿es la realidad tan bonita como suena?
Según consta en el BOE, esa flexibilidad tiene un precio. Toda empresa de menos de 50 trabajadores que haya aplicado ERTE por fuerza mayor, que ya pueda arrancar su actividad y que decida empezar a sacar progresivamente a sus empleados del ERTE empezará a pagar las cotizaciones sociales de todos los trabajadores.
Empezarán a pagarlo porque antes, mientras todos los empleados estaban en el ERTE, no tenían que pagar nada por la Seguridad Social de sus trabajadores.
Pagar más por los que se quedan que por los que "salen" del ERTE
Imaginemos una pyme con 30 trabajadores en ERTE que quiere empezar a ponerse en marcha y para ello solo necesita a tres empleados. Por esos tres empleados que saca del ERTE ahora pagará el 30% de la Seguridad Social en el mes de junio. Por los 27 trabajadores que se quedan dentro del ERTE pagará un 55% de las cotizaciones sociales.
Así quedan los pagos de las cotizaciones durante el mes de junio para empresas que han aplicado ERTEs.
Una de las características que más saltan a la vista en la tabla es que las empresas, tanto las grandes como las pequeñas, tienen que pagar más por los que se quedan en el ERTE que por los que salen.
Según explican desde la Revista de la Seguridad Social, una publicación de la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, esto se hace "para incentivar la reincorporación a los puestos de trabajo del máximo número posible de trabajadores en ERTE".
Cuando merece más la pena estar cerrados
Es decir, que sacar a unos pocos trabajadores del ERTE para empezar a poner en marcha un negocio puede no salir rentable para algunas empresas. Por ejemplo, aquellos empresarios que tengan varios negocios y uno de ellos todavía no se pueda abrir.
Es el ejemplo de Mariló, empresaria de Benidorm. Allí tiene una cafetería, tiendas y un hotel bajo la misma empresa, Milords, donde emplea a unas 30 personas. En esa zona ya están en fase 2 y Mariló podría abrir sus cafeterías y sus tiendas, para empezar a obtener ingresos, pero no su hotel.
Mariló querría sacar a tres trabajadores del ERTE para poner en marcha la cafetería. Casi una treintena del resto de sus empleados seguirían en el ERTE. Sin embargo, empezaría a pagar la Seguridad Social de todos los trabajadores: un 30% por los tres que saca del ERTE y un 55% por los que se quedan dentro.
"Con solo uno de los negocios abierto no puedo hacer frente al salario y a la Seguridad Social de los que he sacado y al porcentaje tan alto de Seguridad Social de los que sigo manteniendo en el ERTE", explica.
Además, asegura que como no hay movimientos entre comunidades y no hay turismo extranjero, la demanda de su cafetería se va a ver muy resentida.
La respuesta del Gobierno
Fuentes de la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y Pensiones aseguran que "la Dirección General de Trabajo ha interpretado que una empresa puede encontrarse en situación de fuerza mayor total respecto de unos centros de trabajo y en situación de fuerza mayor parcial respecto de otros centros de trabajo".
Sin embargo, no han matizado si esto indica que en los centros de trabajo en fuerza mayor total se sigue aplicando la exoneración del 100% las cuotas en el caso de que sea una empresa de menos de 50 trabajadores.
El vacío legal de los ERTEs que ayudan a ahorrar a los empresarios
Sin embargo, también existe el caso contrario. Hay empresarios que han encontrado el vacío legal perfecto para ahorrarse dinero durante la apertura. Esta 'picaresca' consiste en dejar a un solo trabajador en el ERTE para no pagar el 100% de las cuotas.
Siempre y cuando haya al menos un trabajador dentro del ERTE por fuerza mayor parcial, las pymes pagarán un 30% de las cotizaciones de los que salen del Expediente en junio y un 55% de los que todavía están dentro , en lugar de pagar el 100% que deberían abonar en una situación normal.
Dicho de otro modo, se ahorran dos tercios de la Seguridad Social en los trabajadores que empiezan a trabajar y casi la mitad en los que aún están en ERTE con un simple movimiento: dejar en el expediente a un solo empleado mientras el resto trabajan a pleno rendimiento.
