El discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, el pasado miércoles sin dudas ha dado mucho de qué hablar. Mientras el optimismo se instalaba en los mercados, Powell derrumbó cualquier atisbo de esperanza: a la economía de Estados Unidos le costará recuperarse de la pandemia. En este escenario, entra el oro, que ha vuelto a emprender vuelo tras el pesimismo de la Reserva Federal.
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La recuperación será larga y dolorosa en los Estados Unidos. De acuerdo a las proyecciones de la Reserva Federal de Estados Unidos, se espera que el Producto Interno Bruto caiga un 6.5% este año, comparado con la previsión anterior de la Fed de un crecimiento de 2%.
Tras el anuncio de Powell los mercados se giraron a la baja. El Dow Jones incluso cayó casi un 7% este jueves, pero ¿quién fue el único que se mantuvo en positivo? Pues sí, el oro, el activo refugio por excelencia.
El mismo miércoles el precio del metal subió casi un 1%, alcanzando máximos semanales. El jueves superó las subidas del día anterior hasta alcanzar los 1.750 dólares.
"No vimos ninguna buena noticia de esa declaración de Powell y vimos que las tasas de interés se mantendrán en los mismos niveles, que son muy bajos, hasta 2022, y eso es probablemente un poco amigable para el mercado del oro", dijo el analista de Kitco Metals, Jim Wyckoff, en declaraciones a la cadena CNBC
Las medidas de estímulo, buenas noticias para el activo refugio
Lo que sí dijo la Fed es que continuará haciendo todo lo posible para que la economía se recupere. "En la Reserva Federal estamos firmemente comprometidos a utilizar nuestras herramientas para hacer lo que sea posible y durante el tiempo que sea necesario para proporcionar un poco de alivio y estabilidad, para garantizar que la recuperación sea lo más fuerte posible y limitar el daño económico de largo plazo", señaló Powell.
Y estas son buenas noticias para el oro ya que las grandes medidas de estímulo tienden a respaldar al metal, considerado una cobertura contra la inflación y la desvalorización del dinero.
Goldman Sachs espera que el oro alcance los $ 1,800 por onza en los próximos doce meses y hay quienes aseguran que estará incluso por encima de los 2.000. Lo cierto es que no lo vemos tan lejos de ese objetivo, ya que hoy está por encima de los 1.750 y sigue subiendo.