La recomendación del Gobierno francés a sus ciudadanos de no ir a España estas vacaciones pone en riesgo cerca de 1.000 millones de euros de ingresos solo en el mes de julio. "Es pronto para ver el impacto de las cancelaciones", asegura en Capital Radio, Carlos Abella, secretario general de la Mesa del Turismo de España. "España tiene que, con la diplomacia, contar las buenas noticias como la poca incidencia hospitalaria", añade.
Hablamos con Carlos Abella, secretario general de la Mesa del Turismo de España.
El turismo español afronta un verano complicado en el que la reapertura aún es tambaleante pese al rápido avance de la vacunación. "Afortunadamente no estamos en marzo o abril del año pasado", avisa Abella. "Conocemos mejor al virus", añade.
“La variante delta impulsa la tasa de contagios de covid de España a la más alta en Europa continental”, titulaba este miércoles el diario económico británico Financial Times poniendo a España en el centro de la diana.
"Estos titulares hacen mucho daño", expresa Abella en Capital, la Bolsa y la Vida con Luis Vicente Muñoz. "Me duele, porque no se cuenta que, por ejemplo, Madrid lleva dos días consecutivos sin fallecidos".
¿Peligra el verano?
La amenaza de una nueva ola alejaría la posibilidad de que lleguen 17 millones de visitantes extranjeros este verano, como espera el Gobierno. Sin esas llegadas, las reservas ya realizadas se convertirían en cancelaciones en cuestión de días.
Y las cancelaciones ensombrecerían un verano que se presumía hasta hace poco más luminoso. "Es pronto para ver el impacto, pero con el macro brote en Baleares, afortunadamente no se redujeron las reservas de turistas procedentes de Alemania", Carlos Abella, secretario general de la Mesa del Turismo de España a Luis Vicente Muñoz.