Desde 1941 ha llovido mucho. Quienes nacieron entonces cumplirán a lo largo de este año 83 años. En plena posguerra, con la población masculina diezmada por el conflicto bélico, el hambre al acecho y la persecución política. Pues bien, esta semana hemos conocido que en 2023 la cifra de nacimientos es la mínima desde entonces. En nuestro país nacieron 322.075 bebés durante el último año, dato de mínimos que sostiene la alta natalidad entre la población inmigrante.
En Mercado Abierto salimos a la calle para preguntar a nuestra audiencia. ¿A qué nos lleva esto como país, cuando tenemos muchos puestos de trabajo sin cubrir? ¿Es una forma de crecimiento poblacional sostenible?
Repasamos con los oyentes las consecuencias de la cifra de nacimientos en España más baja desde el fin de la Guerra Civil
El salario maternal, una posibilidad
En otros países como Francia o Alemania hay ayudas a la maternidad. En el caso del país teutón existe el salario maternal, una medida que tiene contrastada eficacia para paliar el que es el mayor problema de nuestro país: la caída en picado de los nacimientos. La mujer que tiene descendencia aporta lo que España más necesita: hijos, futuros contribuyentes que financiarán las pensiones, cada vez más numerosas.
Si la situación persiste, entraremos en un invierno demográfico comparable al de Japón, donde las iniciativas del Gobierno ya no funcionan.