El Fondo Monetario Internacional revisa al alza las previsiones de crecimiento para España en 2016 y 2017. Actualiza hoy el organismo sus estimaciones para la economía mundial y espera que España crezca un 2,7% en 2016 y un 2,3% en 2017. Es un 0,2% y un 0,1% más, respectivamente, que en las previsiones de octubre. Esta subida es, además, la corrección al alza más elevada de las realizadas entre las grandes economías.

La bajada de los precios del petróleo y otras materias primas pueden dar mayor impulso del esperado a los países importadores, entre los que se encuentra España. Esta corrección llega pese a la incertidumbre política tras los resultados electorales del 20D y en medio de un contexto global de desaceleración económica.

El Gobierno español también prevé que la economía nacional se beneficie de los bajos precios del crudo, sumando en torno a 0,5 puntos porcentuales adicionales al PIB, según indicó ayer el titular de Economía en funciones, Luis de Guindos. Sin embargo, sus pronósticos continúan por encima de los del FMI, con una previsión de crecimiento del 3% este año y del 2,9% en 2017.

Por su parte, la Comisión Europea vaticina un avance del 2,7% del PIB, en línea con el pronóstico de la entidad presidida por Christine Lagarde.