Dinamarca da el sorpasso a Suiza. La helvetica deja de ser la economía más competitiva del mundo y para un mundo en verde, Copenhague toma la delantera. Es el país más digitalizado del planeta y la ventaja de ser un país europeo le coloca a la cabeza de un tren en el que España es el trigesimosexto de sus vagones.
¿Qué tiene la nórdica para convertirse en la punta de lanza de lo que viene?
Escucha la historia completa en este podcast de Mercado Abierto:
La pandemia, la guerra y la crisis energética de los combustibles fósiles hacen que Copenhague adelante a Suiza en el último ránking mundial elaborado por IMD
Una nación que mira al mar y que se prepara para un futuro en verde reduciendo emisiones de gases de efecto invernadero en la industria y el transporte, principalmente. Dinamarca es un país, no se puede negar, pequeño, ‘pero matón’.
Su peso en la esfera internacional se lo pone, también, Groenlandia, la gran isla congelada del Ártico cuya soberanía tiene Copenhague, pero que se rinden en batalla Rusia, Estados Unidos o China (las grandes economías del mundo).
La danesa es una economía desarrollada. Basada en servicios altamente competitivos en un mercado con un fuerte desarrollo del empleo y un generoso sistema de la Seguridad Social.
Hoy desde Borgen, el complejo donde residen los poderes del Estado danés, los socialdemócratas siguen en el Gobierno desde que tomaran la cabecera ejecutiva desde el final de la Segunda Guerra Mundial. ¿El truco? Que allí se gobierna en coalición.
No todo es bueno
Muchos dicen que Dinamarca es la panacea, pero como en todos los sitios “se cuecen habas” las quejas de la población quedan de la mano de los impuestos; creen que pagan mucho por los servicios que tienen y por la llegada de inmigrantes que, consideran, han puesto en el foco a un país que en la crisis migratoria de 2015 fue uno de los europeos que más presiones recibió.
Así las cosas, recuperando lo bueno. Hoy más del 50% de la red eléctrica de Dinamarca funciona con energía eólica y solar. En 2027 quiere que las renovables satisfagan al 100% de su territorio (43.000 metros cuadrados en los que conviven, junto a la sirena, más de 5,6 millones de habitantes).
Es en este contexto en que el Dinamarca espera lograr una reducción del 70% en las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030 y alcanzar la neutralidad climática, es decir, emisiones netas de gases de efecto invernadero cero, para 2050.
¿La ventaja de la que partes? Medio siglo de experiencia desde la crisis del petróleo de 1973 atacara a una economía dependiente hasta entonces del crudo que hoy ya no quieren ni reflejar en los libros de historia.
Proyectos pioneros
Con una isla en el Mar del Norte Dinamarca quiere probar Hace de esta la primera isla energética del mundo con cientos de turbinas eólicas, naves industriales y tanques de combustible que dan al país electricidad limpia.
En el mar y en aire tienen la próxima gallina de los huevos de oro. Durante las últimas cuatro décadas, Dinamarca ha desarrollado una industria eólica de vanguardia esta es la fuente más barata con la que quieren salir al mercado a ser competitivos.
Supera a suiza
Y precisamente esto es lo que hoy conocemos: Dinamarca es la economía más competitiva del planeta.
Copenhague hace de Suiza una segunda. El país nórdico ha aprovechado la pandemia para arrebatarle a la helvética el primer puesto, según el índice de la Escuela de Negocios IMD.
Por la COVID-19 y la guerra en Ucrania mientra la inflación repunta hasta métricas históricas, Dinamarca es el país digitalmente más avanzado del mundo y ahora ocupa el primer puesto gracias a las buenas políticas, las ventajas que ofrece ser un país europeo, un claro enfoque en la sostenibilidad y el impulso de su ágil sector empresarial.
Esto es lo que dice que tienen bien. La danesa es de esta manera la mejor economía del mundo durante los cierres de los países desarrollados gracias al colchón social, un bajo nivel de deuda, el 33,2% de su PIB que se acerca a unos 355.000 millones de dólares y un progreso digital.
Tampoco depende del turismo. El paro danés está en el nivel más bajo de los últimos 14 años y esperan que de cara a este 2022, lo dice el Gobierno, el PIB acelere su crecimiento un 3,4%.
Así es como Dinamarca ha conseguido el podio. Copenhague, la nueva capital de la economía del mundo. Suiza, lo vemos, una advenediza que se ha dejado superar mientras entre las montañas ya prepara su ofensiva para retomar el vuelo y no perder la fama de que además de un país neutral es un país rico.