El gasto a raíz de la crisis energética ha supuesto ya para los países de la Unión Europea casi los 800.000 millones de euros, según la última estimación de los expertos de Bruegel. Para ser más exactos, calculan que desde el comienzo de la crisis energética –en septiembre de 2021- se han destinado 792.000 millones para proteger a los consumidores del incremento de los costes energéticos.
Alemania lidera el gasto en Europa y destina ya más del 7% de su PIB
Una investigación de Bruegel revela que los países europeos han destinado ya casi 800.000 millones de euros, con Alemania a la cabeza
Es importante destacar que, de los casi 700.000 millones de fondos destinados por la UE, más del 30% han sido asignados solo por Alemania. Por detrás de la economía germana, Italia y Francia figuran en el pódium de países comunitarios que más gasto han destinado a aliviar la presión de los precios energéticos en sus países, con unos 99.000 millones cada uno, eso sí, lejos de los 268.000 millones de Alemania, mientras que Gran Bretaña ha destinado 103.000 millones. No obstante, el estudio excluye las medidas llevadas a cabo a nivel subnacional.
Si miramos a lo que suponen estas cifras en términos porcentuales del PIB de cada país, en el caso de Alemania, estaríamos hablando del 7,5% de su producto interior bruto y del 3,8% en el caso de Reino Unido, según este informe.
¿Cuántos millones han ido a parar a las empresas?
Esta investigación también recoge cuánto han asignado los gobiernos para ayudar a empresas de servicios públicos a través de préstamos, rescates y nacionalizaciones. De nuevo, Alemania se coloca a la cabeza, con 68.000 millones de euros, y Reino Unido que habría desembolsado a este fin aproximadamente 46.000 millones de euros.
Otra de las conclusiones que se extrae es que los gobiernos de la UE, Noruega y el Reino Unido han favorecido medidas no específicas que distorsionan los precios, por ejemplo, recortes en los impuestos especiales y el IVA, en comparación con las medidas de apoyo a los ingresos.
En este sentido, desde Brugel alertan sobre la merma de la capacidad fiscal de las economías europeas para hacer frente a este tipo de gastos y señalan que estos planes generan preocupaciones en algunas capitales de la UE donde proponer más ayudas estatales perturbaría el mercado interno del bloque.
Entretanto, el viceprimer ministro ruso, Alexander Novak, afirma que Rusia planea vender el 80% de sus exportaciones de petróleo y el 75% de sus exportaciones de productos petrolíferos a países ‘amigos’ este año.