La economía de Arabia Saudí se está viendo impactada por la crisis del coronavirus y las medidas tomadas para contener su expansión. Pero también por la crisis del petróleo. Para hacer frente a esta situación, el país ha tomado varias decisiones. Entre ellas, el país triplica el IVA y recorta inversión
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A partir del 1 de julio, el impuesto del valor añadido pasará del 5% actual al 15%. La economía del Reino Saudí también se está viendo impactada por el desplome de los precios del crudo.
Además de esta subida del IVA, el país ha decidido que a partir de junio se suprime el subsidio para hacer frente al coste de la vida que reciben todos los funcionarios del país desde 2018 y que asciende a 1.000 riales (246 euros) mensuales, según publica la agencia estatal saudí SPA.
El ministro de Hacienda, Mohammed al-Jadaan explica que "estas medidas complementan otras adoptadas previamente para mitigar los efectos negativos de la crisis desde una perspectiva sanitaria, así como económica y social".
A través de un comunicado que recoge la agencia estatal de noticias, reconoce que se enfrentan a una crisis "como nunca antes en la historia moderna el mundo había visto, una crisis marcada por la incertidumbre y la dificultad de predecir su alcance y ramificaciones".
Por eso defiende que estas medidas que han adoptado, aunque son duras, son necesarias y beneficiosas para mantener la estabilidad económica y financiera en el medio y largo plazo.
En 2018, el rey Salman de Arabia Saudí ordenó ese pago mensual de 1.000 riales a cada empleado del Estado para compensarlos por el creciente coste de la vida después de que el Gobierno subiera los precios del gas nacional e introdujera el impuesto sobre el valor añadido.
Según las cifras oficiales, el país cuenta con 1,5 millones de empleados públicos.
El reino registró un déficit presupuestario de 9.000 millones de dólares estadounidenses en el primer trimestre.
Suspensión de proyectos: Saudi Vision 2030
Además el gobierno ha decidido cancelar o suspenden algunos gastos operativos y de capital para algunas agencias gubernamentales.
También ha recortado las asignaciones para varias de las iniciativas y megaproyectos de su programa de reforma Visión 2030 con un valor total de 100 mil millones de riales, unos 24.600 millones de euros.
Saudi Vision 2030 es un marco estratégico aprobado por el país, con el que quieren reducir su dependencia del petróleo. También recoge medidas para, además de diversificar la economía, invertir en salud, educación, infraestructuras o turismo.
