China va a imponer un impuesto adicional a los coches de lujo y superdeportivos. El Gobierno va a elevar las tasas un 10% para los coches que cuestan 188.000 dólares o más con el objetivo de controlar el gasto y reducir emisiones, según el ministerio de Finanzas.

La nueva tasa impositiva afectará potencialmente a los modelos de gama alta de fabricantes como BMW, Daimler, Mercedes y Audi y a Ferrari, Aston Martin y Rolls-Royce.

China, encabezada por el presidente Xi Jinping, ha tomado medidas hacia la industria del lujo en los últimos años. Algo, que ha afectado a las ventas de lujo del país como a las bebidas alcohólicas premium y los bolsos. 

Además, Beijing ha emitido reglas de este estilo en otros ámbitos. Ha obligado a los altos funcionarios a reducir los costes de sus desplazamientos y no comprar coches de lujo.

Este aumento de impuestos, será efectivo a partir del jueves. Los analistas y los fabricantes de automóviles, sin embargo, creen que esta nueva tasa de impuestos tendrá un impacto limitado sobre las marcas de lujo comunes como Mercedes-Benz, Audi y BMW que dominan el segmento de mercado de coches de gama alta en China.


"La mayor parte de nuestro negocio no se verá afectado. Pero debido a que esto se acaba de anunciar ayer, todavía estamos evaluando el impacto que podríamos ver en nuestro negocio", ha asegurado un portavoz de BMW con sede en Beijing.