El desafío y los temores que está despertando la Inteligencia Artificial (IA) se encuentran a la orden del día. En solo un mes, han aparecido cerca de 2000 nuevas herramientas, entre las que destaca el boom levantado por ChatGPT. ¿Vulnera la legislación sobre protección de datos?
Los gobiernos comienzan a poner el foco sobre la IA con el objetivo de regular y supervisar su utilización. Recientemente, Italia prohibió el uso de ChatGPT, aunque después reculó. En España, la Agencia de Protección de Datos ha iniciado una investigación para determinar si este bot textual vulnera alguna de las normas establecidas en nuestro país en materia de protección de datos.
Estos nuevos riesgos que surgen en las sociedades actuales, pero también sus ventajas, merecen un análisis en profundidad, que realizamos con la ayuda de Álvaro García Tejedor, profesor titular en la Universidad Francisco de Vitoria, donde también dirige un Centro de Investigación en Inteligencia Artificial.
En el siguiente podcast, puedes escuchar al completo la Entrevista Capital de Luis Vicente Muñoz en 'Capital, La Bolsa y La Vida'.
Álvaro García Tejedor, experto en Inteligencia Artificial, nos detalla los desafíos y temores de herramientas como ChatGPT ante el boom de esta tecnología en los últimos meses.
La solución no está en regular la investigación, sino su uso
García Tejedor reconoce que la premura de tantos y nuevos avances en Inteligencia Artificial en los últimos meses está causando una actividad frenética en los trabajadores del sector, pero también empieza a sentirse en la sociedad en su conjunto.
"Estos sistemas generan todo lo que dan, ya sean imágenes o texto. No copian y pegan, pero es cierto que el entrenamiento de estos sistemas se hace utilizando información tanto de dominio público como con copyright"
Considera positivo que las agencias de protección de datos investiguen si herramientas como ChatGPT pueden estar erosionando la confidencialidad de datos personales y empresariales protegidos. Aunque no ve con buenos ojos que la lupa sobre la Inteligencia Artificial sea de máximos. "No podemos poner puertas al campo", apostilla.
Nuestro invitado capital admite que la vorágine de los últimos meses en torno a la Inteligencia Artificial merece una reflexión sosegada para saber hacia dónde vamos, cómo va a alterar el mercado laboral y, en definitiva, la sociedad en sí misma.
Pero esas necesarias conversaciones no pueden pretender frenar el desarrollo de estas nuevas herramientas, como firmaron hace unos días una serie de tecnólogos de renombre, entre los que destacan Elon Musk.
"No es recomendable ni posible pausar el desarrollo de la IA. La solución no está en regular la investigación, sino su uso, que son cosas distintas"
