Hoy, 7 de octubre, se celebra el Día de la Educación Financiera, una jornada clave para concienciar sobre la importancia de adquirir conocimientos financieros en un mundo cada vez más complejo. Alberto Aza, portavoz de CECA, destaca la importancia del sector bancario en la formación en finanzas. "Somos un actor clave en Educación Financiera (...) Nuestras antiguas cajas de ahorro nacieron con la virtud de educar en la cultura del ahorro", asegura.
Escucha la entrevista en el siguiente podcast:
Hoy, 7 de octubre, Día de la Educación Financiera, hablamos con Alberto Aza, portavoz de CECA, la patronal de las antiguas cajas de ahorros.
El papel de los bancos
El portavoz de CECA asegura que "de todos los actores que participamos en materia de Educación Financiera las entidades financieras son siempre las que se sitúan en primer lugar". Por varias razones, según apunta, como "el volumen de recursos dedicados, por la amplitud de los programas y, sobre todo, por el alcance de los beneficiarios a los que podemos llegar".
¿Por qué implicarse en mejorar la educación financiera de los ciudadanos?
Un cliente informado siempre puede ser un cliente exigente, que podrá buscar otras alternativas para determinadas cuestiones fuera del circuito tradicional de la banca. Sin embargo, Alberto Aza asegura que el sector debe implicarse en fomentar la Educación Financiera porque "contribuye a la salud financiera de las personas pero también a la del país", señala.
Aza recuerda que a lo largo de la vida las personas tomamos muchas decisiones financieras y que conviene que las tomemos con conocimiento de causa y de manera informada porque, de lo contrario, "los riesgos son importantes". Además, subraya que "la suma de la tranquilidad financiera de los individuos contribuye a reformar la estabilidad financiera del país".
Además, esgrime otra razón para implicarse en divulgar Educación Financiera: la de mejorar nuestro ratio comparativo en esta materia con nuestros vecinos europeos. "El último Eurobarómetro dejaba claro que somos el cuarto país por la cola en cuanto a conocimientos financieros".
En un entorno cada vez más digitalizado y con decisiones económicas más complejas, la educación financiera se convierte en una herramienta esencial para garantizar el bienestar colectivo.
