El sector del automóvil ha acelerado para ascender con fuerza la cuesta de septiembre. Con la fuerza, precisamente, de los motores eléctricos. Denostados, olvidados, en un segundo plano durante buena parte de 2024, en el noveno mes del año sus ventas se han recuperado.
En nuestro país se han disparado las matriculaciones de eléctricos e híbridos un 9,3% en el noveno mes del año. Los eléctricos han subido un 32% y reducen su caída hasta el 5,7% en lo que va de ejercicio. ¿Por qué este repentino incremento?
La rebaja de precios y las necesidades de los fabricantes para cumplir con las exigencias de emisiones de CO2 impulsan las ventas.
La rebaja de precio de Tesla, clave
La rebaja del precio del Tesla Model 3 ha revitalizado las ventas. Entre el 1 y el 24 de septiembre se matricularon 1.689 unidades, casi la mitad de los ocho meses anteriores juntos. Se sitúa solo por detrás del Dacia Sandero, el más vendido.
Una tendencia que se repite en otros territorios. En Francia la compañía de Musk ha vendido 5.435 automóviles el mes pasado, un 366,52% más que en septiembre de 2023.
Todo ello en un contexto negativo para los vehículos eléctricos. Los datos no mienten y el sector se queja. Hace apenas unos días, el sindicato europeo ACEA pedía medidas urgentes ante la caída de la demanda de estos coches.
Los fabricantes comunitarios demandaban a las instituciones europeas medidas de alivio antes de la entrada en vigor de los nuevos objetivos de CO2 para coches y furgonetas en 2025. Así como adelantar a 2025 las revisiones sobre la normativa sobre CO2 para vehículos pesados y ligeros, provistas para 2027 y 2026, respectivamente.
