Una de las noticias más destacadas de este martes es la consecución por parte de Shanghái de su objetivo de COVID 0. Llevan tres días sin detectar nuevos casos de coronavirus, por lo que, de forma inmediata, van a ir retirando las restricciones y cuarentenas.
Sin embargo, este nuevo escenario que se abre no va a mejorar los cuellos de botella y los problemas con las cadenas de suministro. En clave de inteligencia económica, con la colaboración de AON España, profundizamos en esta cuestión con Carlos Bereciartua, su director de Consultoría.
Hablamos con Carlos Bereciartua, director de Consultoría de AON España, para desgranar los riesgos principales de las empresas a nivel internacional.
Los fallos en las cadenas de suministro, octava preocupación para las empresas
Nuestro invitado capital considera "complicado" que el paulatino levantamiento de restricciones rebaje la preocupación que despierta en el tejido empresarial mundial. "Se ha creado un cuello de botella con una parada en el transporte marítimo", indica.
Esta problemática, lejos de suponer un riesgo puntual para las empresas, ha llegado para quedarse. "Con la globalización de las cadenas de suministro, cualquier impacto en una parte del mundo puede afectarnos a todos", afirma Bereciartua.
La preocupación es tan elevada porque supone una interrupción en la actividad normal de las empresas. De hecho, la paralización empresarial es la segunda preocupación en la mencionada encuesta realizada por AON España. "La principal causa es la parada de un proveedor clave", por lo que, al final, ambos riesgos se encuentran interrelacionados.
