El Banco Central Europeo reducirá el importe del plan de compra activos a 15.000 millones de euros al mes a partir de octubre. En principio, el plan de compras solo se prolongará hasta diciembre, pero la decisión dependerá de cómo evolucione la inflación. Respecto al precio del dinero, Mario Draghi ha explicado este jueves que los tipos de interés se mantendrán en los niveles actuales, al menos, hasta el verano de 2019.
Estas decisiones cogen por sorpresa a un mercado que esperaba a un BCE más agresivo. De hecho Jesús de Blas, del departamento de renta variable Bankoa Credit Agricole, teme que, "si no se establece una fecha próxima para subir esos tipos de interés, Europa no tendría medios económicos con los que hacer frente a una posible crisis en el futuro". Escuche el análisis completo en el siguiente audio:
El Banco Central Europeo (BCE) ha mantenido el tipo de interés de referencia para sus operaciones de refinanciación en el 0%, mientras que la tasa de la facilidad de depósito continuará en el -0,40% y la de la facilidad de préstamo en el 0,25%. Además, Draghi no ofrece una fecha para subir esos tipos de interés, aunque habla de que en Verano de 2019, "se podrá empezar a barajar si subirlos o no".
Según ha confirmado la autoridad monetaria, el programa de compra de activos por importe de 30.000 millones de euros al mes seguirá hasta el final de septiembre de 2018. Tras esa fecha, y hasta diciembre de 2018, el BCE procederá a comprar a un ritmo de 15.000 millones de euros al mes, cuando "terminarán", según ha recalcado Mario Draghi.
De este modo, el banquero italiano ha comunicado la salida del programa de expansión cuantitativa (QE, según sus siglas en inglés).
Entre los datos ofrecidos en la rueda de prensa, el Producto Interior Bruto de la zona euro registró una expansión anual del 2,3% en 2017, frente al 1,8% correspondiente a 2016, lo que supone el mayor ritmo de expansión del bloque del euro en la última década.
De todos modos, las previsiones de la banca europea auguran una desaceleración económica para los próximos 3 años. En 2018, se espera que la el PIB de la UE crezca un 2,1%; en 2019, un 1,9% y; para 2020, el último año para el que arrojan una predicción, se espera que Europa crezca a un ritmo del 1,7%.
Por otro lado, la tasa de inflación interanual de la zona euro se situó el pasado mes de mayo en el 1,9%, frente al 1,2% del mes anterior, lo que representa el mayor incremento de precios desde abril de 2017, como consecuencia del fuerte repunte de la energía y de los servicios. De este modo, la tasa de inflación subyacente en los países que han adoptado el euro como moneda común, que es resultado de excluir del cálculo la evolución de la energía, los alimentos, el alcohol y el tabaco, repuntó en mayo hasta el 1,1% en tasa interanual, frente al 0,7% del mes anterior.
Con respecto al desempleo, la tasa de abril, la última disponible, bajó a su mínimo desde diciembre de 2008 al caer al 8,5%, una décima menos que la registrada en marzo y hasta siete décimas menos que un año antes, según los datos ofrecidos por Eurostat. El próximo encuentro del Consejo de Gobierno del organismo responsable de la política monetaria de la zona euro se celebrará el 26 de julio.