El mercado de deuda pública se tensiona tras la publicación de las actas del Banco Central Europeo, que en su última reunión pareció tantear un recorte en el programa de compra de bonos. Pero para Jesús Amador Castrillo, analista de Bankinter, "las actas realmente no muestran ningún cambio radical de mensaje", pese a las dudas del mercado que se resiente ante las declaraciones de algunos bancos centrales en el foro de Sintra y a las emisiones de deuda en Francia y España, que hacen que aumente la rentabilidad de los bonos.
Las actas, en palabras de Castrillo "confirman que el BCE va a seguir fomentando el crecimiento de la economía a través de un programa de estímulos y con tipos de interés muy bajos", incluidas las compras de deuda.
Aunque el Banco Central Europeo aplica una política monetaria expansiva, la Reserva Federal lleva el rumbo contrario, y se esperan subidas de los tipos de interés a partir de septiembre en EEUU. En este sentido, aseguran desde Bankinter, podrían surgir dudas sobre la expansión económica estadounidense debido a una "cierta ralentización" en la producción industrial y en las ventas minoristas. Para Castrillo "aunque los indicadores macroeconómicos no sean lo suficientemente buenos, la FED continuará con el rumbo actual de su política monetaria", por lo que "la normalización de la política monetaria sea podría ser algo más lenta de lo que la propia Fed planea". Algo en todo caso menos probable.
En cuanto al crudo, Castrillo asegura la volatilidad en los próximos meses debido a los factores geopolíticos podría continuar, aunque espera un precio en torno a los 45 dólares el barril en el medio y largo plazo. Los factores que presionan los precios a la baja son una demanda que no crece de forma proporcional al crecimiento de la economía y que los países de la OPEP "han demostrado tener un control cada vez menor sobre la oferta".