El FMI acaba de publicar su informe de Primavera de Perspectivas Económicas, donde cuantifica por primera vez el impacto de las tensiones arancelarias iniciadas el pasado 2 de abril. Según explica Luis Maldonado, profesor del Instituto de Empresa y Técnico Comercial y economista del Estado, el organismo internacional prevé una reducción significativa del crecimiento mundial.
El profesor Luis Maldonado analiza el impacto de la guerra arancelaria en el nuevo informe de perspectivas económicas del Fondo Monetario Internacional.
El impacto de la guerra arancelaria
"Es la primera vez que se cuantifica el impacto en términos económicos de los incrementos arancelarios que se iniciaron el 2 de abril. Y el Fondo Monetario lo cuantifica en un 0,5% del PIB", señala Maldonado, quien destaca que el FMI "estima un crecimiento para el conjunto de la economía global del 2,8%".
Esta cifra supone un nivel notablemente bajo si se compara con el promedio histórico. Como explica el experto: "El promedio en las primeras dos décadas del siglo actual, es decir, hasta la pandemia en el 2020, era del 3,7%. Efectivamente, es un nivel relativamente bajo que viene marcado claramente por las tensiones arancelarias".
Estados Unidos, principal afectado
Resulta paradójico que quien más sufrirá las consecuencias de esta escalada arancelaria será precisamente quien la inició. "La más importante de ellas, por cierto, es Estados Unidos, para el cual el Fondo Monetario prevé un crecimiento menor en 0,9 puntos. El más significativo. Es decir, claramente en ese sentido es una caída, podríamos decir, casi autoinfligida por la decisión de los incrementos arancelarios", afirma Maldonado.
"Si en economía hay algo que está probado desde hace mucho tiempo es que el libre comercio y la libertad de comercio supone una mayor capacidad de crecimiento de todas las economías"
Riesgos para la estabilidad financiera
El informe del FMI también alerta sobre los crecientes riesgos para la estabilidad financiera mundial. Aunque Maldonado matiza que "el Fondo tiene mucho cuidado de no hablar de crisis financiera, habla de menor crecimiento", sí reconoce que existen preocupaciones importantes.
El experto hace referencia a un gráfico presentado por la directora del FMI que muestra la curva de la deuda americana "en forma de sonrisa", lo que significa que los tipos de interés "caerían pero subirían muy abruptamente en el medio y largo plazo. Eso claramente marca una tensión en el mercado de deuda americana y anticipa la posibilidad de tensiones en los mercados".
El caso español: una excepción temporal
En este panorama de revisiones a la baja, España aparece como la única economía avanzada cuya previsión de crecimiento ha sido revisada al alza. Maldonado explica este fenómeno:
"En España se da una cierta inercia a vientos de cola favorables que tienen que ver tanto con una moderación de los costes laborales como con unos menores costes energéticos que vienen marcados por dos décadas de inversión en las energías renovables y mucha menor dependencia, por ejemplo, del gas"
Sin embargo, advierte que no debemos confiarnos. "Una cosa que a mí me ha llamado mucho la atención es que la previsión del crecimiento para la economía española efectivamente este año es mayor, pero es el país de los países avanzados para el cual la previsión de crecimiento el año que viene baja más: del 2,5% este año al 1,8%, cuando en la mayoría de economías avanzadas para el año 2026 se prevé un cierto repunte alcista".
El experto concluye que, aunque España se beneficia actualmente de factores favorables como el turismo y el sector exterior, el FMI hace "una llamada de atención a aprovechar esa cierta inercia para realizar las reformas necesarias en el medio y largo plazo", ya que la economía española no quedará exenta de los efectos de las tensiones arancelarias y los problemas económicos que puedan sufrir sus principales socios comerciales.