Argentina necesita resultados rápidos y el Gobierno no dispone de tanto tiempo. "La gente vota con el bolsillo y por eso perdió el kirchnerismo", señala Wendes. Aun así, la economía argentina sigue mal: la inflación es muy alta, el pronóstico para este año es de un 35%. El país se encuentra en plena recesión tanto desde el punto de vista de la actividad industrial como de la actividad económica." No va a ser fácil darle la vuelta a esto por más que haya buenas expectativas y por más que ahora los empresarios apoyen al nuevo Gobierno, no será fácil captar inversiones", apunta el economista. "Lo que primero captará Argentina es mucha financiación, mucha deuda internacional, que es la principal consecuencia de este cambio de paradigma y el acuerdo con el fondo buitre, capítulo que el Gobierno de Kirchner no quiso cerrar", asevera.
Argentina también busca abrirse al mundo. Y Mauricio Macri ya se ha aplicado: un ejemplo es que el presidente estadounidense, Barack Obama, visitará la semana que viene el país. Algo significativo si tenemos en cuenta los encontronazos que tuvo Obama con su antigua homóloga argentina. "Es un símbolo de cómo se está produciendo esta transición política, la visita de Obama es una muestra de que el país se está recolocando en el mapa mundial", explica Wendes. "Venimos de 12 años de kirchnerismo y casi hemos pasado al lado contrario, sin anestesia", recalca.
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IMAGEN: Flickr/Moonhawk Kim
