Determinados niveles de desigualdad pueden ser justos y eficientes pero tenemos que ponernos de acuerdo en qué nivel de desigualdad vamos a aceptar y cómo lo vamos a soportar. Es uno de los principales mensajes del economista francés Thomas Piketty en su último libro 'Capital e ideología'. El economista Daniel Fuentes, traductor del libro al español, analiza las principales claves del libro en Capital Radio.
Entrevista a Daniel Fuentes, economista y traductor del libro 'Capital e ideología' de Thomas Piketty
"Una sociedad justa no implica uniformidad ni igualdad abolsuta", señala el especialista en desigualdad económica, Piketty. La desigualdad de riqueza puede ser justa en la medida en que una sociedad sea el resultado de distintas opciones y aspiraciones, contribuya a mejorar las condiciones de vida y aumentar las oportunidades de los más desfavorecidos. "Pero este argumento de Piketty no debe usarse para justificar cualquier nivel de desigualdad", advierte Fuentes.
Los tres pilares de Piketty
La propuesta de Piketty tiene tres grandes pilares: gobernanza supranacional, cogestión empresarial y una propuesta fiscal.
En cuanto a gobernanza supranacional, el economista francés llega a la conclusión de que una de las limitaciones del éxito de los modelos socialdemócratas que dieron nacimiento a las clases medias es que sus recetar están limitadas al perímetro de los estados nación. "No tenemos una fiscalidad internacional del capital, ni siquiera en la UE compartimos impuestos", explica Fuentes.
La cogestión empresarial que defiende Piketty está inspirada en los modelos sindicales alemanes y de Europa del norte. Modelos en los que los trabajadores de las empresas participan en las decisiones. Tienen una presencia fijada por estatutos en los consejos de administración y dirección, de mo que la toma de decisiones no responde exclusivamente a los criterios principales de los que poseen el capital.
La propuesta fiscal de Piketty es el pilar más polémico de su libro 'Capital e ideología'. Él eliminaría los impuestos indirectos. "No existiría IVA en su propuesta fiscal excepto los impuestos ambientales, que no tienen una finalidad exclusiva recaudatoria si no de generación de incentivos", apunta Daniel Fuentes.