La Covid-19 hace estragos en las economías de todo el mundo, incluso Alemania. La locomotra europea registró su mayor desplome en el segundo trimestre desde los años 70. El PIB germano se contrajo un 9,7%, una cifra algo menor de lo pronosticada por los servicios estadísticos del país.
Una caída histórica impulsada por el consumo de los hogares que se desplomó entre los meses de abril y junio un 10,9%, mientras que la inversión en maquinaria y bienes de equipo se desplomó un 19,6% en pleno confinamiento a nivel global,
Por su parte, la formación bruta de capital fijo (inversión) en la construcción se redujo un 4,2%, tras un primer trimestre muy fuerte de este indicador.
Aumento del gasto público
No obstante, el batacazo de la primera economía de la Unión Europea no fue mayor gracias al incremento del gasto público en ese mismo periodo, precisamente para hacer frente a los efectos de la pandemia.
La caída del PIB de Alemania está lejos de la registrada por España al desplomarse en el segundo trimestre un 18,5% con respecto al primero, que había sido hasta ahora el peor de la serie histórica del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Crece el déficit
El Estado alemán obtuvo en el primer semestre del año un déficit equivalente al 3,2 % del producto interior bruto (PIB) debido a la crisis del coronavirus, informó este martes la Oficina Federal de Estadística (Destatis).
El conjunto de las administraciones central, regional y local más la caja de la seguridad social gastaron en ese período 51.600 millones de euros más de los que ingresaron. En comparación, en el primer semestre de 2019 el Estado alemán había obtenido un superávit de 46.500 millones de euros.