Con el objetivo de hacer frente a la elevada inflación, el Gobierno ha aprobado una rebaja de 20 céntimos por litro en las estaciones de servicio. Sin embargo, el hecho de que las gasolineras tengan que anticipar ese descuento a los consumidores tiene al sector muy preocupado.
Sobre esta medida y las consecuencias en el sector hemos hablado con, Manuel Jiménez Perona, presidente de la Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (AESAE), acude a los micrófonos de Capital Radio.
Puedes escuchar la entrevista íntegra en este podcast:
"Afecta a la economía de nuestras familias"
En primer lugar, Jiménez adelanta que sus socios están haciendo todo lo posible por aplicar este descuento, pese a que "con ello están arriesgando su futuro".
Para explicar la situación que están sufriendo los empresarios del sector, el presidente de AESAE ha puesto como ejemplo el cómo afectaría a una economía familiar el hecho de que el Gobierno le obligase a anticipar la mitad de su liquidez, sin saber cómo ni cuándo les será devuelta. En el caso de estas empresas su liquidez lo es todo, "es su pulmón" y su único medio para atender las necesidades y obligaciones.
Jiménez apunta que el Gobierno no se ha reunido con ellos en ningún momento y que tampoco les han llamado, por lo que se enteraron de la aprobación del Real Decreto como todos los españoles. No les han consultado ni preguntado sobre cómo podía afectar al sector la puesta en marcha de esta medida.
La solución que propone el presidente de AESAE consistiría en reducir el precio del carburante mediante una rebaja del impuesto de hidrocarburos.
Jiménez achaca al Gobierno el haber estado esperando durante tres semanas a encontrar la solución en la reunión que tenía pendiente en Europa en vez de buscarla por su propia cuenta. "El Gobierno tiene que dirigirse al problema directamente", matiza.
Además, Jiménez considera que el Gobierno está incumpliendo uno de sus derechos básicos recogidos en la Constitución. Añade que, al contrario que otros sectores, estos empresarios no pueden declararse en rebeldía o en huelga para exigir un cambio o soluciones, por lo que tienen que abrir sí o sí.
Jiménez concluye con que la solución del Gobierno ha sido "imponer una solución que afecta al último de la cadena y cuya liquidez es su pulmón".