Un portavoz del aeropuerto londinense de Heathrow ha afirmado hoy que el plan de los activistas medioambientales de volar drones de juguete en zonas restringidas para conseguir la inmovilización del mayor aeródromo de Europa es “ilegal y contraproducente”.
Remarca que la lucha contra el cambio climático es un reto para todo el mundo que tiene mucha importancia. Sin embargo, éste se trata de un problema que no se puede solucionar al recurrir a medidas criminales.
“Volar drones a menos de 5 kilómetros de un aeropuerto es considerado ilegal debido al riesgo que supone para la seguridad de los pasajeros” apunta el portavoz del aeródromo.
Para evitar los problemas que el proyecto del grupo ecologista llamado “Heathrow Pause” podría causar en el aeródromo, el responsable ha asegurado que las autoridades del aeropuerto trabajarán juntos con la policía metropolitana.
En un comunicado publicado esta mañana los activistas han anunciado que a partir del 13 de septiembre llevarán a cabo sus planes de interrumpir el tráfico aéreo en Heathrow.
No obstante, aunque pretenden entrar en las zonas restringidas del aeropuerto con estos drones apuntan que no pondrán en riesgo a nadie, ya que los dispositivos no volarán en las rutas de los aviones.
Este plan tiene como objetivo la inmovilización del aeropuerto durante un tiempo indefinido para marcar el paso y llamar la atención del gobierno británico sobre el cambio climático y la necesidad de elaborar medidas más estrictas para reducir los gases de efecto invernadero.