Acciona Energía, la mayor empresa de renovables de entre las que planeaban salir a Bolsa, ya está en el mercado. Se ha estrenado con un “aprobado” a pesar de los malos recuerdos que traía el estreno de la otra empresa de energías limpias que salía este año, Ecoener. Pero la otra gran compañía del sector que iba a saltar al parqué, la filial de Repsol, guarda silencio sobre su OPV.
Te lo contamos en este podcast de Expediente Abierto.
A finales de 2020, cuando todo lo que olía a renovables brillaba en Bolsa, Repsol decidió que no quería perder ese tren. Entonces el mercado empezaba a especular con una posible salida a Bolsa del negocio de energías limpias de la petrolera.
El 29 de octubre llegaba la confirmación de Josu Jon Imaz, su consejero delegado. En un encuentro con analistas, Imaz revelaba que Repsol estaba estudiando, entre otras cosas, una salida a Bolsa de sus renovables.
No fue hasta noviembre cuando el consejero delegado de la compañía se lo reveló públicamente al mercado. Entonces decía que ese estreno bursátil era una de las opciones que barajaban para su negocio de energías limpias.
Semanas más tarde llegó 2021. El suflé de las renovables en bolsa empezó a bajar. Tres de las seis compañías de energías limpias que se planteaban salir al mercado en la primera mitad de 2021 se echaron atrás.
En febrero Josu Jon Imaz aseguraba en una conferencia con analistas que todavía estaban analizando todas las oportunidades para su división y que tenían un margen de 18 meses para concretar la operación.
Sin embargo, a finales de marzo Repsol daba un nuevo paso imprescindible para sacar a bolsa una compañía: transformaron el negocio de renovables en una sociedad anónima. Entonces, en la junta de accionistas de la compañía, un inversor salía a alertar a los 'jefazos' de Repsol. "¿Qué quieren, que tengamos dos chicharros en vez de uno?", les preguntaba.
Quizá lo que no se esperaba ni la empresa ni aquel accionista era la espantada que iba a sufrir el sector en Bolsa en las próximas semanas. Probablemente, tampoco esperaban que Ecoener, la única empresa que se atrevió a salir al mercado en la primera mitad de 2021, lo hizo con un desplome del 15%.
Entonces Acciona Energía ya había puesto toda la carne en el asador y ya había avanzado demasiado en el proceso de salida a Bolsa. Era tarde para echarse atrás. Pero ante la falta de apetito en el mercado la compañía tuvo que reducir la oferta y bajar el precio de sus acciones. Pese a todo, la operación se saldó con un aprobado: una subida del 7,3% en su primer dia en el mercado.
Mientras todo esto ocurría, Repsol ha permanecido en silencio. La última noticia que tenemos sobre su negocio de renovables es de hace dos meses, cuando transformó el negocio en una sociedad anónima.
Sin embargo, una de las últimas informaciones sobre el tema en los medios de comunicación apuntan a que la banca ya ha avisado a Repsol de que debería retrasar la OPV y buscar un socio primero.
Concretamente, el diario Cinco Días aseguraba que los bancos le aconsejaban vender ahora una participación minoritaria a un fondo a través de una ampliación de capital para poder financiar su plan de expansión. Pero con una condición: que el socio vendiera esa participación en una futura salida a Bolsa que se retrasaría unos dos años.