Reuters.- El grupo de aerolíneas irlandés Ryanair Holdings registra sus primeras pérdidas en décadas durante su temporada clave de verano, avisando que podría tener que reducir su capacidad operativa aún más este invierno, mientras la segunda ola de casos de COVID-19 provoca nuevos confinamientos en toda Europa.
La mayor aerolínea de vuelos de bajo coste de Europa dijo que las restricciones impuestas por la pandemia redujeron el número de pasajeros en un 80% en los seis meses hasta el 30 de septiembre, temporada en la que normalmente obtiene la mayor parte de sus beneficios anuales.
Sin embargo, en el primer semestre de su año fiscal registró una pérdida de 197 millones de euros (230 millones de dólares), frente a los beneficios de 1.150 millones del mismo período del año pasado. Una encuesta de la empresa entre analistas había pronosticado de media una pérdida de 244 millones de euros.
Primeras pérdidas desde hace 11 años
La aerolínea líder en Europa del sector de bajo coste solo había perdido dinero una vez en los últimos 30 años, en el ejercicio de 2009, cuando, no obstante, logró un modesto beneficio durante su temporada veraniega.
El grupo, cuyo consejero delegado Michael O'Leary se refirió en septiembre a la próxima campaña de invierno como un "desastre", y rechazó hacer previsiones de beneficios para el conjunto del ejercicio financiero que termina el 31 de marzo, pero dijo que espera registrar mayores pérdidas en el segundo semestre.
Ryanair reiteró sus planes de transportar 38 millones de pasajeros en el conjunto del año fiscal, en comparación con los 149 millones del mismo período del año pasado, y dijo que el número podría disminuir aún más "si los Estados de la UE siguen gestionando mal los viajes aéreos e imponiendo más restricciones al viaje sin coordinación".