La reacción de los inversores ha sido positiva y los títulos de Telefónica han comenzado con subidas que, en algunos momentos, ha llegado al 5%. El consenso del mercado cree que las cifras han cumplido y, sobre todo, premia la reducción del dividendo menos contundente de lo esperado. En lo que va de año, los títulos de Telefónica suben un 15%.
La operadora ha elevado el beneficio neto un 38,5% hasta los 1.582 millones de euros en un año complicado que ha estado lastrado por las provisiones aplicadas para un plan de reestructuración de empleo.
Los ingresos totales de la compañía ascendieron en 2020 a 43.076 millones de euros, un 11% menos afectados por la covid y también por el efecto del cambio de divisas.
Tal y como esperaba el mercado, la operadora ha decidido recortar el dividendo para 2021. Sin embargo, esa reducción ha sido inferior a lo previsto. Finalmente, para 2021 el dividendo será 0,30 euros por acción mediante la modalidad de dividendo flexible voluntario frente a los 0,40 euros de un año antes.
Baja la deuda
Telefónica continúa recortando deuda, tal y como le exige el mercado, y a cierre de 2020 la ha bajado hasta los 35.228 millones de euros, un 6,7 % menos que en 2019. Con una caída de más de 2.500 millones de euros anuales y una reducción en el cuarto trimestre de más de 1.400 millones de euros.
Victoria Torre, responsable de Oferta Digital de Singular Bank, explica las claves de las cuentas de la operadora
¿Por qué baja el dividendo?
César Fernández, presidente de ISBIF (Instituto Superior de Bolsa Inversión y Finanzas) explica la evolución del dividendo de Telefónica a lo largo de los años y cómo han ido cayendo debido al descenso de los beneficios y de la generación de caja.
Fernández considera que el modelo de negocio de la operadora es de poco valor añadido y con productos que se diferencian podo de sus rivales. Además está operando en un sector muy intensivo en capex, de mucha inversión para mantener las redes y con una legislación europea que favorece poco a las operadoras frente a nuevos competidores.
Todo ello provoca, según este experto, que las compañías bajen sus resultados y su generación de caja y por eso arrastran una deuda muy importante.
Una deuda que Telefónica reduce a través de la venta de activos y no de generar caja recurrente en el negocio. “Es un sector y una empresa en la que hay que tener cuidado”, comenta.
Para los analistas de Bankinter, los resultados no alcanzan las estimaciones del consenso. Respecto al recorte del dividendo, consideran que es positivo a medio plazo para el grupo porque permitirá destinar la generación de caja a acelerar la reducción de deuda y a la normalización de los niveles de inversión para no seguir perdiendo competitividad.
Estos expertos, señalan que la rentabilidad por dividendo se mantiene elevada en 8,2%. Tras este “ejercicio de realismo” del grupo que permitirá normalizar el nivel de inversiones, ralentizar la venta de activos y acelerar la reducción de deuda. Bankinter revisa la recomendación a neutral desde vender.