Oeyzon Genomics trabaja en un inhibidor para cánceres hematológicos y algunos tumores sólidos. El proyecto se llama ORY-1001 y acaba de perder gran parte de su financiación, que pagaba la Suiza Roche. Oryzon se desploma en bolsa cerca de un 30%.

Desde la compañía, su presidente Carlos Buesa asegura "que la retirada de la financiación por parte de Roche no se debe a la pérdida de confianza en la molécula que están desarrollando", sino a que la compañía suiza está reestructurando sus inversiones y reduciendo algunos de sus costes.

En en segundo comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, desde Oryzon aseguran que no tienen registrados derecho de cobro derivados del acuerdo con Roche, ni obligaciones que puedan suponer un pasivo ni una contingencia. Concretamente, "los cobros recibidos por la sociedad a lo largo de la duración del acuerdo de licencia no son reembolsables".


Pese al revés que ha sufrido la compañía, desde Oryzon Genomics aseguran que seguirán adelante con la investigación, y que esperan encontrar un nuevo inversor "porque tienen plena confianza en el proyecto". Pese a todo, los inversores están penalizando a la compañía en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB).