La bolsa de Tokio ha cerrado con pérdidas del 0,20%, a pesar de unos datos macro que sugieren un aumento de la demanda interna. El gasto de los hogares ha caído un 0,4% en octubre a un ritmo más lento que la cifra estimada. Y también han bajado las ventas al por menor, un 0,1% interanual, pero la caída es bastante inferior a lo esperado (-1,2%). Además, la tasa de paro se ha mantenido en octubre en el 3%, la mejor cifra en más de dos décadas.
En el mercado de divisas, la fortaleza del yen ha hecho mella entre los fabricantes de automóviles como Mazda con caídas del 1% o los fabricantes de electrónica Sharp ha bajado el mismo porcentaje.
El resto de mercados han negociado planos. Los operadores han mirado a varios acontecimientos de esta semana como la reunión de los mayores productores de petróleo mañana.
Shanghai ha concluido la sesión plano con las inmobiliarias a la cabeza después de que el Gobierno chino siga intensificando sus esfuerzos para contener el precio de la vivienda. Dos de las ciudades más importantes, Shanghai y Tianjin han impuesto nuevas restricciones.
Corea del Sur, el Kospi se mantiene estable. Samsung ha subido un 0,18%. La surcoreana ha dicho en un comunicado que está planteando cambiar su estructura corporativa.
Una jornada asiática en la que los precios del petróleo han retrocedido, después de ganar más de un 2% durante la sesión estadounidense.
Por cierto que, el banco central de Singapur ha recomendado a los bancos del país protegerse del aumento de los “préstamos malos”. Este informe se produce en un momento en el que la morosidad de las entidades se ha elevado un 2,1% en el tercer trimestre de 2016 frente al 1,5% del mismo período de hace un año.
Tokio cierra en negativo pese a unos datos macro mejores de lo esperado
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