Josep Prats, gestor de Abante Asesores, cree que es bastante verosímil que la operación de fusión entre Caixabank y Bankia vaya adelante porque solo tienen que ponerse de acuerdo el Gobierno y la Fundación La Caixa. Harán un gran banco en el que se reagrupan la práctica totalidad de las antiguas cajas de ahorros. Se creará un actor muy importante en España con posiciones casi hegemónicas con niveles de cuota de mercado del 30% en ahorro y 25% en crédito. Nacería el “gran actor español”.
Prats apunta a que les sobrarían oficinas en algunas zonas pero en otras serían complementarias. Bankia no es fuerte en Cataluña con lo que ahí no habría redundancia. En Canarias y Baleares, tendrían la práctica totalidad del mercado. “Veremos si se plantea algún tipo de desinversión forzada, aunque no lo creo”, comenta.
Evidentemente, habría sinergias de costes muy importantes que ahora son difíciles de cuantificar pero serían miles de millones al año.
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El experto de Abante Asesores cree que se creará un banco con una cuenta de resultados más fuerte a largo plazo aunque a corto plazo tendrán gastos de reestructuración e indemnizaciones que podrían llevarles a beneficios cero y tener que hacer dotaciones extraordinarias
Aun así, las sinergias puedan cuantificarse en el largo plazo en torno a los 10.000 millones de euros.
Según Prats, cuando se haya recuperado el sector bursátil, para el Gobierno será mucho más fácil desinvertir el porcentaje de Bankia que le quede en ese momento.
La noticia es buena para los inversores. El conjunto de los dos ganará más que cada uno por separado. El mercado debería reaccionar de forma positiva.
Prats apunta que ahora lo interesante sería que se produjesen fusiones transnacionales porque daría un mensaje al mercado de que el euro está para quedarse y que vamos a una unión bancaria real.
En España podríamos ver próximos operaciones protagonizadas por Banco Sabadell, Unicaja y Liberbank