Ahora que estamos en un clima de alta inflación, movimientos geopolíticos y necesidad de llegar cuanto antes a nuestra senda vende y objetivos de carbono, el Banco Europeo de Inversiones adquiere un gran protagonismo como entidad financiera y prestamista de nuestras grandes cotizadas. Esta semana ha firmado con Repsol y también con Cellnex. Inversión desde Europa para modernizar España: el BEI como catalizador.
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Esta semana el Banco Europeo de Inversión cierra préstamos con Repsol y Cellnex para expandir la cartera sostenible y reducir la brecha tecnológica.
¿Qué es el BEI?
La entidad se Creaba ya en 1958, en Luxemburgo, y está formada por un consejero de cada así de la Unión Europea y uno de la Comisión. Basa su actividad en conceder financiación en condiciones muy favorables a proyectos que contribuyan a lograr los objetivos de la Unión Europea. Y aunque lo hace tanto fuera como dentro del bloque comunitario, lo cierto es que el 90% de la financiación que concede lo hace dentro de las fronteras del continente.
¿Y estos objetivos cuáles son? Impulsar el potencial de crecimiento y empleo en Europa, así como apoyar las medidas para mitigar el cambio climático y también fomentar las políticas de la UE en otros países. Eso sí, siempre debemos tener en cuenta que el dinero que presta esta entidad no precede del presupuesto del bloque.
Préstamo a Repsol de 575 millones de euros: objetivo sostenibilidad
La compañía ya destaca que su último proyecto permitirá suministrar electricidad a 645.000 hogares españoles anualmente y que ayudarán a reducir las emisiones de efecto invernadero.
Expandir el 5G: el caso de Cellnex
...otra de sus últimas operaciones destacadas en España ha sido con Cellnex. El lunes ambas corporaciones firmaban este préstamo por 315 millones...en concreto lo hacía el vicepresidente del BEI, Ricardo Mourinho, y el Director Financiero y de desarrollo Corporativo de Cellnex, José Manuel Aisa.¿Con qué fin? Buscan apoyar el desarrollo de infraestructuras de telecomunicaciones móviles en países como España, Portugal, Francia, Italia y Polonia...una tecnología básica para desplegar el ansiado 5G.
