Repsol duplica el beneficio impulsada por los precios de petróleo y gas. Durante el primer trimestre de 2022, la compañía registra un beneficio neto ajustado de 1.056 millones de euros frente a los 471 millones del primer trimestre de 2021.
La clave de las cuentas es la evolución del área de exploración y producción. Se trata de una división que aporta el 69% del beneficio gracias a la subida de los precios de las materias primas. Las estaciones de servicio representan algo menos del 5% del total del resultado neto ajustado.
El beneficio neto sube a 1.392 millones de euros.
Precios de realización
La fuerte subida de los precios de las materias primas, en un trimestre marcado por la guerra en Ucrania, eleva los precios de realización (de venta) del crudo y gas de de la copmapñía. En concreto, el precio de realización del petróleo sube un 69% y el precio de realización del gas sube un 120%.
La producción media del primer trimestre fue de 558.500 barriles equivalentes de petróleo, inferior a la del mismo periodo de 2021, tras la venta de activos en Malasia, Rusia, Ecuador, Vietnam, Noruega y Argelia, y el cese de la producción en España. Este descenso fue parcialmente compensado por la adquisición de activos en EE.UU.
Repsol cierra el primer trimestre con una deuda neta de 5.900 millones de euros, ligeramente superior al fin de diciembre, 5.762 millones. Por su parte, la liquidez se situó en 9.823 millones de euros, suficiente para cubrir 3,5 veces los vencimientos de deuda a corto plazo, por encima de las 2,95 veces de final de diciembre.