El fondo soberano de Noruega, el más grande del mundo, obtuvo un retorno de un 19,9% de la inversión el año pasado y gana un récord de 1,69 billones de coronas noruegas (180.000 millones de dólares) en un entorno de recuperación del mercado de valores.
No obstante, el mejor rendimiento del fondo se produjo en 2009 cuanto consiguió una mejora de un 26%.
"2019 ha sido un año muy bueno para el fondo (…) este es el mayor aumento de valor en un solo año en la historia del fondo", ha señalado el gobernador del banco central Oeystein Olsen, quien preside el consejo de administración del fondo.
El año pasado, el rendimiento de las inversiones ascendió a casi 34.000 dólares para cada uno de los 5,3 millones de personas que viven en Noruega, y el valor total del fondo equivale ahora a unos 207.000 dólares por cada hombre, mujer y niño.
El fondo tiene participaciones en más de 9.000 empresas en todo el mundo y posee el 1,5% de todas las acciones que cotizan en bolsa. También invierte en bonos y en el mercado inmobiliario.
Mejores y peores inversiones
La partida de acciones, en las que coloca un 70% de las inversiones, ha tenido una rentabilidad de un 26%. Las empresas que más han contribuido a esta mejora han sido Apple y Microsoft seguidos por Nestlé. Mientras, los peores fueron Nokia, Pfizer y Swedbank.
Las inversiones en renta fija (el 26,5% del total) obtuvieron una media de un 7,6%, y las destinadas al mercado inmobiliario rindieron un 6,8%.
Estados Unidos, Japón y Alemania son los tres principales mercados de deuda pública para el fondo, que tiene inversiones en 74 países. España ocupa el sexto puesto.
El fondo, que ahorra los ingresos de la industria del petróleo y el gas, vale ahora tres veces el producto interno bruto anual de Noruega y sus rendimientos proporcionan una financiación vital para mantener el estado de bienestar del país.
Estas han sido las últimas cuentas del consejero delegado Yngve Slyngstad, quien anunció a finales del año pasado que dejará el cargo después de una docena de años en el puesto.
Se espera que en los próximos meses se haga cargo del fondo el sucesor de Slyngstad, que todavía no ha sido nombrado por el consejo del banco central.