“El Dow Jones acaba de tocar los 27.000 puntos por primera vez en su historia”. Imagínense esa frase con la voz de Donald Trump, porque así celebraba este jueves el presidente en su cuenta de Twitter la nueva conquista del índice americano.
Dow just hit 27,000 for first time EVER!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 11 de julio de 2019
Y le ha costado mucho llegar hasta aquí. Ni más ni menos que 540 días en alcanzar esta nueva cota, la segunda vez que más ha tardado en la última década desde un múltiplo de mil al siguiente.
La vez que más tiempo pasó entre una cota y otra fue el momento entre los 18.000 y los 19.000. Pasaron 700 días, casi dos años, desde finales de diciembre de 2014 hasta finales de noviembre de 2016. Y el mercado estaba tan emocionado, que desde la CNBC aseguraban que, históricamente, pasar este tipo de barreras en el Dow Jones da lugar a rallies.
Como acabamos de ver con lo difícil que le resultó al Dow tocar los 19.000 y ahora los 27.000, esto no siempre se cumple. Pero dio la casualidad de que en el momento de decirlo, la CNBC iba a tener razón.
El 22 de noviembre de 2016 el Dow Jones superó los 19.000 puntos al cierre solo dos semanas después de la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos. Así, el Dow ya insinuaba lo que estaba a punto de ocurrir.
El 25 de enero, solo 5 días después de que el nuevo presidente de Estados Unidos tomara la posesión del cargo y solo 64 días después de que el Dow superara los 19.000, el índice conquistaba una nueva cota: la de los 20.000 puntos. La bolsa americana se quedó tan prendada de Donald Trump, un amante confeso de los mercados, que consiguió un récord de récords: superar 5 máximos históricos en múltiplos de 1.000 en tan solo un año.
El nuevo récord de 25.000 puntos al cierre el día 4 de enero de 2018 marcaba el cierre de un año 2017 histórico. Y David Blitzer, presidente de S&P Dow Jones Indices, advertía que quizá debíamos empezar a preocuparnos por qué iba a pasar ahora.
E igual que Trump fue, en cierta medida, el responsable de la subida de 2017, también fue uno de los culpables de la masacre de finales de 2018. Su guerra comercial y el alarmismo que generó en torno al estado de las economías mundiales llevó al Dow a desplomarse un 16% desde septiembre hasta diciembre. Incluso le llevó a registrar cuatro de sus trece peores caídas en un solo día de toda su historia.
Y el 24 de diciembre los inversores y sus sueños del rally de navidad, parecieron disiparse por completo tras la caída de 653 puntos en tan solo una sesión. Por eso el día de Navidad y el cierre de la bolsa sirvió como una jornada de reflexión. Y algunos analistas, como Edward Yardeni, presidente de Yardeni Research, aseguraban que a principios de año íbamos a seguir en unos niveles terriblemente bajos.
Pero probablemente nadie imaginaba lo que iba a ocurrir tan solo 48 horas después de esa caída. El 26 de diciembre el Dow Jones hizo historia y subió por primera vez en la vida más de 1.000 puntos en tan solo un día. 1.086 puntos y una subida porcentual de un 4,98%, fueron los detonantes de que esa corrección terminara y de que la tendencia alcista volviera al Dow Jones. Desde entonces el índice tiene una subida acumulada de un 18,5%.