El inversor de bonos Bill Gross alerta contra una desaceleración global de la productividad, como resultado de la crisis financiera, que hará imposible alcanzar el crecimiento de la economía prometido por Donald Trump del 3% y revelará que los mercados financieros están sobrevalorados.

En su perspectiva de inversión mensual explica que “los altos índices de crecimiento y la productividad que los impulsa, son probablemente recuerdos de una época lejana” y que “los mercados de renta variable tienen demasiada esperanza en el precio” o que los precios de los activos han sido elevados a niveles artificiales.

Según el pronóstico del multimillonario “disminuir la inversión y el comercio de las empresas y un nivel continuo de tipos de interés vamos ha dado lugar a una mala asignación de capital hacia proyectos de bajo riesgo y a una desaceleración en la creación de pequeñas empresas”. También alerta de que el proteccionismo, con aranceles más altos o restricciones a la inmigración, podrían empeorar esa desaceleración de la productividad
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