La estadounidense Rivian está obsesionada por reducir costes. Le va la vida en ello. En los últimos meses el fabricante de coches eléctricos ha eliminado más de 100 pasos del proceso de fabricación de baterías, 52 piezas de equipo del taller de carrocería y más de 500 piezas del proceso. El resultado ha sido una reducción del 35% en el coste de materiales (según ha explicado su director ejecutivo RJ Scaringe. En medio de este plan para darle la vuelta a su cuenta de resultados, la americana recibe oxígeno: le llegan hasta 5.000 millones en forma de alianza con Volkswagen. La alemana se convierte en el airbag financiero de Rivian para ganar acceso a la propiedad intelectual del software de la empresa participada por Amazon.
La empresa de EV Rivian, lleva meses reduciendo procesos y costes, se dispara un 50% en bolsa tras anunciar su alianza con Volkswagen
Solo en el primer trimestre de 2024, Rivian registró pérdidas de 1.500 millones de dólares. La empresa nunca ha registrado ganancias trimestrales desde su fundación en 2009. El problema para el sector de vehículos eléctricos radica ahora en la disminución de la demanda por las subidas de tipos de interés y las dudas sobre la regulación de la movilidad sostenible. Además, las empresas occidentales trabajan por mejorar su eficiencia en medio de la fuerte competencia de los EV que fabrica China.
