Zara vende ropa pero también tecnología, un pilar en el que se sustenta la compañía para conocer los gustos de los consumidores que varían en el tiempo y a la vez, optimizar los procesos para mejorar las ventas. Para ello ha encontrado en el big data a su mejor aliado. Gracias a esta herramienta, Inditex conoce tus gustos, se anticipa a ellos, si te gustan los pantalones pitillo o las faldas, sabe si este verano se lleva los lunares o las flores. Después diseña y produce la ropa en cuestión días. Por tanto, el big data le permite ganar tiempo y dinero.

Inditex ha invertido en tecnología más de 1.000 millones de euros en los últimos cuatro años. Como parte de esta inversión y con el objetivo de dar una respuesta más inmediata a las necesidades de los clientes en tienda, Zara ha desarrollado en los últimos años una tecnología de identificación por radiofrecuencia (RFID), el proyecto estrella de la compañía que permite identificar individualmente las prendas desde las plataformas logísticas hasta su venta y mejorar la atención al cliente.

La clave es la localización de los artículos, que pasa a ser mucho más rápida y precisa. De este modo, cuando un cliente busca una prenda concreta, el personal puede consultar la disponibilidad de ese producto en tiempo real en ese u otro establecimiento cercano para facilitar el proceso de compra.

Un GPS en cada prenda


El proceso arranca con la codificación del alarmado de las prendas en los centros logísticos, con este paso se controla la mercancía. Es decir, cada camiseta, cada zapato, todo está controlado. Es como si llevara cada prenda un GPS incorporado o una matrícula para estar controlado.

Una vez que un envío ha llegado a la tienda, es posible también saber qué prendas deben reponerse y cuál es su ubicación, las prendas que se venden y las que no, conocer que colores o diseños gustan a los clientes. También la realización de inventarios es más eficiente y un 80% más rápida.

Revistas, libros, editoriales y catálogos donde ha publicado el fotógrafo de arquitectura David Frutos

El chip que codifica el sistema RFID en las alarmas de las prendas, accesorios y calzado pierde sus datos en cuanto el producto es identificado en las cajas de las tiendas durante el proceso de pago. Las alarmas se pueden reciclar hasta cien veces.

Este sistema se ha implantado en 47 mercados y la previsión para este año es estar operativo en más de 2.000 tiendas. Pablo Isla, presidente de la compañía subraya que “el sistema RFID es el cambio más importante en la operativa de las tiendas del grupo hasta la fecha. Es un proyecto de I+D+i creado sólo por Inditex” dice.

La otra pata del negocio es la rapidez para distribuir el producto y el diseño. Cada semana salen casi cuatro millones de prendas. La compañía reparte dos veces a la semana la ropa que demanda cada una de las 6.300 tiendas que posee en el mundo y lo hace en 48 horas por camión para el mercado nacional y en avión para el resto del mundo.

Inditex, un Gran Hermano


La venta online es otra de las patas del negocio. Inditex está presente con este formato en 28 países. Arteixo cuenta con un departamento dentro de sus instalaciones dedicado a ello. Unas pantallas gigantes conectadas con todas las tiendas del mundo, permiten observar el número de personas conectadas a la aplicación de Zara alrededor del planeta. En el momento de la visita había 7.338 personas conectadas a la aplicación de la compañía vía smartphone.

nasa ok

A ellos se suma un centro de datos digno de la NASA. En esta planta no hay colores, todo es más sobrio, serio. Lógico, estamos en el corazón informático de la empresa, el RAC es la conexión con todos los ordenadores del mundo.
Los iPads, los ordenadores y los 1.300 kilómetro de cables son los dueños del lugar. Preside la sala una gran pantalla que ocupa el largo y el ancho de la pared para mostrar un mapa del mundo. Aquí vemos todas las tiendas que están abiertas en ese momento.

Desde Arteixo, los informáticos, que trabajan los 365 días del año, controlan los movimientos de los vendedores en cada establecimiento, las incidencias en cualquier establecimiento del mundo o en tienda online (si hay cualquier problema, salta una alarma y se soluciona el problema desde la central). Una vez
más la tecnología juega a favor de la compañía.

Arteixo: un día en la sede central 


La sede de Inditex se encuentra en una amplia zona industrial de Arteixo, un pueblo a 11 km de la ciudad de la Coruña. Las instalaciones cuentan con la sede central de Inditex, Zara Woman, Zara Man y Zara Home. Para hacernos una idea, este espacio junto con el centro logístico ocupa lo mismo que 100 campos de fútbol. El resto de empresas del grupo (Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Pull & Bear, Oysho y Uterqüe) están repartidas por España, principalmente en Barcelona, Zaragoza y en Madrid (Alcalá Meco).

Simplicidad y sobriedad son las palabras para definir las oficinas. La sede central esta rodeada de amplias cristaleras donde la luz del día es la protagonista. Aquí trabajan 4.000 empleados de 34 nacionalidades distintas. Llaman la atención porque muchos de ellos van vestidos a la última con estilismos 100% Zara.

El circuito Inditex se pone en marcha a partir de aquí. Los profesionales, llamados country managers, “son cazadores de tendencias”, como define una portavoz del grupo. Viajan por el mundo para estar al tanto de las modas e inspirarse. Se reúnen con las encargadas de las tiendas para averiguar qué demandan los clientes.

A partir de aquí empiezan a crear para que los 300 diseñadores plasmen las ideas. Una vez aprobado el diseño, los patronistas realizan el primer boceto de la prenda el cual pasa a ser digitalizado para elaborar los patrones. Después, el departamento de calidad analiza las prendas, en concreto el tejido, acabado y el control de calidad.

recorte telas ok

La fabricación de prendas se rige por la filosofía del Right to Wear, un compromiso para elaborar productos éticos, seguros y de máxima calidad. Para garantizar productos responsables, la compañía cuenta con 1.500 profesionales del grupo Inditex así como empresas científicas y tecnológicas. El diseño y el uso de fibras textiles es una constante en Inditex también el consumo de algodón orgánico, una tendencia creciente en las colecciones. En 2014, a falta de datos definitivos, usó algo más de mil toneladas de algodón ecológico lo que supone un crecimiento del 92% en peso.

Se cuida hasta el último detalle sobre todo en el siguiente proceso. Dar el visto bueno a las colecciones. Los modelos se prueban las prendas y el equipo de Inditex escoge y desecha aquellas prendas que no incluirá en la colección. En la visita vimos a una modelo muy joven en plena sesión de fotos para la web. En dos días estaba la colección subida en la página web con la foto de la modelo.

Si avanzamos, la sede de Arteixo cuenta con una especie de calle compuesta por tiendas piloto de Zara mujer, hombre, niños y hogar. Una portavoz de la compañía lo define como “laboratorios de imagen” para ver cómo se van a organizar las verdaderas tiendas expuestas al público las cuales tienen que ser una copia y un reflejo de esas tiendas piloto. Aquí se ensaya las luces, los olores, el mobiliario, los maniquíes, la forma de ordenar las prendas en las estanterías…

Proceso de fabricación


Casi la mitad de la producción de Inditex se fabrica en países próximos es decir, en España, Marruecos, Portugal y Turquía. En otros países como China se fabrica un 7%, en India y Bangladesh un 4% y en Camboya un 1%, según la compañía.

Una parte de la producción se realiza en las fábricas que pertenecen al grupo. Inditex realiza de forma directa el aprovisionamiento de tejido, la marca, el corte y el acabado final de las prendas, subcontratando la fase de confección con empresas especializadas. En cuanto a los proveedores externos, reciben también en muchos casos desde Inditex el tejido y otros elementos necesarios para producir las prendas.

Toda la producción, con independencia de su origen, se recibe en los centros logísticos de cada una de las cadenas. La distribución se realiza dos veces por semana, incluyendo siempre en cada envío nuevos modelos, lo que permite una constante renovación de la oferta en tiendas.

El sistema logístico con la implantación del sistema RFID antes explicado, cierra el ciclo y permite que desde la recepción del pedido en el centro de distribución hasta la entrega de la mercancía en la tienda transcurra 24 horas para los establecimientos europeos y un máximo de 48 horas para las tiendas en América o Asia. Este es el verdadero secreto de Inditex.