En Mercado Abierto ponemos el foco en Bezoya, una marca que apuesta mucho por la sostenibilidad, son el ejemplo de que alcanzar una huella de carbono neutral es posible. Para ello, hablamos con Juan Luis González, director de Negocio de Bebidas Pascual.
La firma de agua mineral es la marca del grupo que va más avanzada en materia de sostenibilidad.
Bezoya llega a su 50 aniversario muy fuerte y más renovables y sostenibles que nunca. Un ejemplo de ello es que las botellas están hechas de otras botellas, son un 100% de plástico reciclado… Y es que fue una de las primeras marcas en apostar por este tipo de envasado. Además, estos envases –que se denominan PET- permiten reciclarse una y otra vez.
Gracias a este reciclaje, la marca redujo el año pasado el consumo de 10.300 toneladas de plástico virgen, lo que se traduce en 427 millones de botellas. A pesar de estas buenas cifras, en 2024 han ido más allá y han reducido un 5% más el uso y el peso del plástico.
El manantial de Bezoya se ubica en el Parque Natural de la Sierra de Guadarrama y desde la compañía una de sus principales preocupaciones es la conservación de su entorno.
Huella de carbono neutral
Desde el año 2022, Bezoya es neutral en la huella de carbono. Esto se ha conseguido reduciendo al máximo todas las emisiones y compensándolas, por ejemplo, con el uso de energías 100% de origen renovable.
En cuanto a la movilidad, la marca también es un referente. Toda su flota comercial es 100% y eléctrica y están explorando nuevos retos para ser todavía más sostenibles.
Dentro del grupo Pascual, al que pertenece Bezoya, la marca de agua ha sido la pionera en clave de sostenibilidad y ha avanzado mucho más rápido que el resto de las marcas que integra. No obstante, todas ellas apuestan por un futuro más sostenible y se están adaptando a ello para conseguir ser neutrales.
Si te gusta este tipo de contenido, suscríbete a la newsletter Claves ESG pinchando en la imagen que aparece abajo