La eléctrica italiana Enel ha ofrecido 45,22 reales por acción de Electropaulo y supera la propuesta de Neoenergía, subsidiaria de Iberdrola, de 39,53 reales. En total 2.000 millones de dólares por la mayor distribuidora energética de Brasil. Con Electropaulo, Enel accedería al área metropolitana de Sao Paulo. 24 ciudades que proporcionan el 16% del Producto Interno Bruto del país.
Las dos grandes eléctricas europeas comenzaron la batalla por el control de la compañía en abril. Desde entonces, el precio de las acciones de Eletropaulo casi se ha duplicado. Tras la retirada de Energisa, otra gran distribuidora brasileña, Enel y Neoenergía se disputaban el liderazgo del sector. De formalizarse, Enel ampliaría sus servicios en el país carioca que ya opera en Río de Janeiro, Ceará y Goiás.
La batalla por el control de Electropaulo
La puja por Electropaulo comenzó después de que AES, principal accionista con el 50,52% de los títulos, decidiera vender su participación. El consejo de administración de Electropaulo ya anunció que apoyaría la venta de acciones a la empresa con mejor propuesta. La oferta de Enel todavía tiene que ser aprobada por los accionistas y formalizada en la bolsa de Sao Paolo el 4 de junio.
Neoenergía perdería la posibilidad de reforzar su posición como primera compañía en número de clientes del sector eléctrico brasileño. La filial de Iberdrola ha agotado todas las posibilidades. Neoenergía acudió a la Cámara de Arbitraje de Mercado (CAM) después de que Electropaulo anulara el acuerdo alcanzado en abril para una ampliación de capital. Iberdrola, por su parte, acusó también a Enel ante la Comisión Europea de competencia desleal.
