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Mapfre ha obtenido en los nueve primeros meses de este año un beneficio atribuible de 673 millones de euros, lo que supone un descenso del 1,6%. Esta caída se debe fundamentalmente al incremento de la tasa impositiva, a los tipos de cambio y a la mayor contribución a los beneficios de aquellos negocios que la sociedad comparte con socios externos.
La aseguradora ha registrado unos ingresos de 19.793 millones de euros, un 1,6% más que el año anterior, y ha aumentado su volumen de primas un 1,8%, hasta alcanzar los 16.857 millones de euros.
Según el comunicado de Mapfre remitido a la CNMV, estos resultados han estado marcados por "el importante crecimiento del negocio procedente de Brasil y de otros países latinoamericanos, la progresiva recuperación en España y la positiva evolución de la actividad de Reaseguro y Asistencia, manteniendo el ratio combinado en niveles excelentes (95,8%)".
El beneficio antes de impuestos y minoritarios de la aseguradora aumentó un 13% respecto a los nueve primeros meses de 2013, hasta alcanzar los 1.454 millones de euros.
La compañía ha señalado que pagará un dividendo a cuenta de 0,06 euros por acción a cuenta de los resultados de este año, cifra un 20% superior a la del año pasado. De este modo, los dividendos totales que abonará la sociedad este año se elevarán a 0,14 euros por acción, destinando un total de 431,2 millones de euros a retribuir a sus accionistas.
