La gigante británica de telecomunicaciones BT anunció hoy que suprimirá unos 13.000 empleos en tres años como parte de una reestructuración para reducir costes y cambiar su modelo de negocio.

En un comunicado a la Bolsa de Londres, el grupo reveló un cambio de estrategia empresarial, que incluirá la eliminación de su sede en la capital británica así como nuevas inversiones y el desarrollo de innovadores productos.

Junto con los 13.000 despidos, que afectarán sobre todo a personal administrativo y en puestos de mando intermedios, BT planea contratar a unos 6.000 nuevos empleados en la sección de servicio al cliente.

El grupo prevé también un programa de reducción de costes a tres años por valor de 1.714 millones de euros y una serie de inversiones "en proyectos que aporten valor añadido e impulsen el crecimiento a largo plazo".

En este sentido, planea ampliar su infraestructura de teléfono móvil con una inversión de 4.229 millones de euros y la apertura de treinta "modernos" centros de trabajo en el Reino Unido, con el cierre de su sede londinense.


BT pretende cambiar el modelo de negocio para ofrecer "experiencias diferenciadas para el consumidor", mediante una red "más integrada" y "convergencia de productos" de línea fija, móvil o banda ancha, aprovechando su amplia red de clientes e infraestructuras.

El consejero delegado, Gavin Patterson, destacó que la empresa "está en una posición única para ser líder en servicios y conectividad convergente".

"Somos claramente líderes de mercado en cuanto a la escala de nuestra relación con los clientes", señaló Patterson, que subrayó que el grupo ofrece "productos y servicios esenciales tanto para los consumidores como para la empresa, a través de diversos canales, a fin de satisfacer sus necesidades"