SpainNab ha presentado el informe del último ejercicio sobre la inversión de impacto en España. Una inversión que alcanza ya al cierre de 2021 los 2.399 millones de euros, un 18 % del total procedente del capital privado (436 millones), el 68% de la banca ética y social (1.638 millones) y un 10% que llega de las fundaciones patrimoniales (230 millones).
Si nos comparamos con otros vecinos europeos, la inversión de impacto en Francia es más elevada, ya que alcanza los 5.000 millones de euros y en Alemania 8.000 millones. Pese a que en España sean cifras inferiores, José Luis Ruiz de Munain, director general de SpainNab, confía en este sector “en auge y crecimiento”.
Además, el director del organismo destaca el papel que están jugando en nuestro país los fondos de capital privado ( venture capital, private equity...), que "han crecido un 33% en el último año".
Escucha la entrevista completa en este podcast de Mercado Abierto:
Hablamos en Mercado Abierto José Luis Ruiz de Munain, director general de SpainNab, consejo asesor para la inversión de impacto en España
Desde SpainNab buscan la democratización de la inversión de impacto y consideran que ayudarán en ello los cambios normativos que prepara el ejecutivo con respecto a la inversión en capital privado, dado que se habla de una rebaja desde los 100.000 a los 10.000 euros en el mínimo de inversión.
Mayor conciencia social y medioambiental
El mundo inversor cada vez está más concienciado hacia lo social y medioambiental. Es por ello que desde SpainNab siguen siendo optimistas con respecto a lo que puede crecer este año la inversión de Impacto, pese al escenario económico de desaceleración, elevada inflación y subidas de tipos hacia el que caminamos.
Una inversión de Impacto que, además de la rentabilidad moral que produce, también persigue claros objetivos de rentabilidad económica. De hecho, Ruiz de Munain, la fija en una banda entre el 4% y el 15%, dependiendo de la ecuación rentabilidad/riesgo que exija el perfil de inversor. "Una rentabilidad que con los tiempos que corren, con una inflación galopante, es relativamente buena", explica.