2017 y 2018 han sido dos años completamente opuestos si hablamos del mercado. También lo refleja el análisis de Finizens de volatilidad de los últimos 30 años. De hecho, según este estudio, en 2017 se alcanzó el mínimo de volatilidad en las últimas décadas. Sin embargo, en apenas un año, la volatilidad volvió. Pero no volvió de una manera tan brusca como creemos, apunta Semenzato.
"La media de la volatilidad en 2018 y sobre todo del último trimestre está perfectamente en línea con la media observada en las últimas décadas", explica. Por eso, Semenzato cree que el miedo asociado a esa volatilidad "no parece estar justificado por los fundamentales del mercado y por los datos absolutos".
Pero ante tanto miedo entre los inversores, Semenzato explica que existe una solución para reducir esa volatilidad a la mitad, y está en la diversificación. ¿Cómo?: "Hay que diversificar lo máximo posible las carteras en cuanto a las clases de activos como a las zonas geográficas y divisas". Además, considera que también es esencial cubrir el máximo numero de posiciones posible, que estén lo mas descorrelacionadas entre sí".