- ¿Quién gana y quién pierde con la quiebra de Thomas Cook?
- Análisis: "La quiebra de Thomas Cook es una tragedia"
Analizamos con el abogado Fernando Fuster Fabra hasta qué punto tendrán que rendir cuentas
Los directivos de Thomas Cook enfrentan una investigación por la quiebra de la compañía. La solicitud tiene como objetivo descubrir hasta qué punto son responsables de la bancarrota y si sus decisiones han perjudicado a los acreedores y los planes de jubilación de sus empleados.
"Una quiebra puede ocurrir por muchas razones y ésas no están tipificadas en la ley ni se penaliza a los administradores", explica Fernando Fuster Fabra, socio del departamento mercantil de Fuster Fabra Abogados. Donde sí existe responsabilidad, sin embargo, es si ha habido una falta de diligencia en la administración que haya desembocado en esta situación.
La investigación se exige en un contexto de fuertes críticas sobre los salarios de los altos ejecutivos de las empresas. Los dirigentes de Thomas Cook recibieron en conjunto un total de 20 millones de libras esterlinas en calidad de remuneración y bonificaciones.
"Cuando se piden responsabilidades de este tipo, lo normal es que se lleven por la vía judicial", explica Fuster Fabra.
A lo largo de la historia, hay un caso similar en España a través del cual podemos entender la magnitud de este proceso. Es el caso de viajes Marsans, que tras su quiebra se siguió un procedimiento judicial para buscar responsabilidades en la junta directiva
Pero en estos casos hay que hacer una distinción. Por un lado, están los socios que tenían participaciones de Thomas Cook, que "ya tienen suficiente pena con la pérdida de su inversión", como señala Fabra. Por otro lado, están los responsables que han manejado los fondos de la sociedad, que son "quienes tendrán que demostrar que hicieron todo lo posible para salvar la compañía", aclara el experto.