Deutsche Bank obtiene un beneficio neto atribuible de 232 millones de euros entre enero y junio, un 83% menos que en el mismo período del ejercicio anterior.
Los ingresos han lastrado los resultados del primer banco de Alemania. En un mercado difícil y con bajos tipos de interés, como explica la entidad, los ingresos se han reducido un 9% en los seis primeros meses del año, hasta los 7.617 millones de euros.
La caída de los ingresos fue especialmente fuerte en el segundo trimestre. Como consecuencia de la incertidumbre económica que el sí al 'Brexit' ha impuesto en los mercados, bajaron hasta los 7.400 millones de euros, un 20% menos que el mismo periodo del año anterior.
Las cuentas de Deutsche Bank se han aliviado con la reducción del 14% en los gastos no financieros. Refleja menores gastos por litigios y costes de compensación.
Su Consejero Delegado, Jhon Cryan, se ha mostrado satisfecho con el progreso realizado. Los resultados muestran la "reestructuración sostenida" que lleva a cabo la entidad. Asegura que "si el débil entorno económico se mantiene", deben "ser más ambiciosos en la velocidad y la intensidad de la transformación".