Tesla, el fabricante de vehículos eléctricos ha sorprendido a Wall Street con unos ingresos que aumentaron casi un 127%, hasta 5.485 millones de dólares, en el semestre con respecto al mismo periodo del año anterior. Esto se debe a las ventas de placas solares y baterías y a la gran cantidad de pedidos de su nuevo model 3, que superan los 1.800 cada día. Estos ingresos son mejores de los previstos por el consenso de mercado que auguraba 200 millones menos en ventas.
Las ventas de coches en el primer semestre han subido un 107,7% hasta los 2.286,6 millones de dólares. La compañía espera que a finales de año el margen de beneficio sea del 25%. Además las ventas del modelo S y X en el semestre han sido de 47.077 unidades y espera que crezcan aún más en segundo semestre.
Tesla, eso sí, presenta unas pérdidas semestrales que ascienden a 798 millones de dólares, un 38,7% más que en el mismo periodo del año anterior. En datos trimestrales los números rojos de la compañía son un 36,9% más altos que entre abril y junio de 2016 con 401,4 millones de dólares de pérdidas.
El grupo ha entrado en un nuevo mercado. La fabricación de placas solares adaptables a cualquier tejado y, junto con la venta de baterías le ha supuesto 500 millones de dólares en ingresos, un 1.782% por encima del año anterior. El presidente ejecutivo de Tesla, Elon Munk, quiere convertir a la automotriz en una compañía de transporte y energías renovables.
Tras la presentación de resultados, las acciones de Tesla subieron un 7,40%, a 325,89 dólares en el mercado fuera de hora.