Signos de sobrevaloración en el precio de la vivienda y subida de los créditos en vigilancia. Son dos de las alertas que deja el Banco de España en su último informe de Estabilidad Financiera. En el caso del mercado inmobiliario, esa sobrevaloración no significa sobrecalentamiento; además, la entidad no observa un riesgo sistémico que haga necesarias herramientas macroprudenciales. Pero el entorno de mayor inflación y escenario de tipos, podrían modificar el escenario, según reconoce el BdE.
En el caso de los créditos en vigilancia especial, suben un 14% y acercan a cerca de 94.000 millones de euros. Estos préstamos registran mayor probabilidad de impago respecto a los que están en situación normal sin llegar a entrar en mora. El Banco de España estima que el peso de los créditos en vigilancia especial sobre el total de la cartera de préstamos alcanza el 8%, 2,2 puntos más que antes de la pandemia.
De esos 94.000 millones, más de 61.000 millones son préstamos a empresas, lo que supone un aumento del 25,7 % respecto a finales de 2020. Algo más de 31.400 millones corresponden a créditos concedidos a familias.
Las operaciones objeto de refinanciación, que suelen estar asociadas a posibles problemas de repago por parte de los acreditados crecen a un ritmo del 14,3%. Y los sectores más afectados por la crisis del COVID-19 siguen mostrando las mayores señales de deterioro, especialmente en el caso de los préstamos en vigilancia especial.
De la financiación concedida por los bancos con avales del Estado durante la pandemia, el Banco de España explica que hay 3.000 millones impagados. Esto supone lo que supone una tasa de morosidad del 3,5 %. En vigilancia especial se encuentran unos 17.900 millones de préstamos con avales del ICO, más del 20,2 % del volumen concedido.
Aprobado a la banca
Ante el entorno de incertidumbre económica, el Banco de España ha vuelto a someter a las entidades a un test de estrés con un escenario adverso y otro severo. El BdE no pone nota al resultado pero reconoce que todas las entidades aprueban.
Eso sí, el contexto estresado al que se somete a la banca en los modelos estresados no replican un entorno de guerra o de suspensión de suministro de Rusia.
Las entidades reducirían 1,8 puntos y 3 puntos su ratio de capital CET 1 en un escenario adverso y uno severo, respectivamente. El BdE pide a las entidades que extremen la prudencia y no liberen provisiones pese a que de promedio considera que su capacidad de resistencia es adecuada.
Debilidades de la economía española
Aunque el Banco de España considera que no es momento de aplicar medidas reestrictivas en la economía española, sí pide un plan. El objetivo es que cuando la situación económica mejore, se pueda confiar en una reducción de los actuales niveles de déficit y deuda. Además, el organismo recuerda que la elevada deuda y déficit de nuestro país elevan nuestra vulnerabilidad.