En la serie de programas que realizamos en colaboración con AECIM, la Asociación de Empresas del Comercio e Industria del Metal de Madrid, hemos abordado la situación de los talleres en la Comunidad con Ana Ávila Bravo, directora corporativa de Asetra, asociación que representa a los más de 5.000 talleres madrileños de reparación de vehículos ante las diferentes Administraciones Públicas. En primer lugar ha destacado que cerraron el año 2024 con un incremento de la facturación de un 10,5% respecto a 2023. Eso sí, Ana Ávila destaca que "le ha ido bien a mecánica y neumáticos, pero mal a carrocería". Destaca como un reto subir la rentabilidad que sigue siendo un desafío para el sector.

Ávila advierte de que "no falta trabajo, pero hace falta sacar partido a ese trabajo, y con la rentabilidad actual no están muy satisfechos". Entre los principales obstáculos del sector destaca la presión de las aseguradoras. "Las compañías miran más por la competencia entre ellas y que el cliente tenga un precio bajo en su seguro, pero eso repercute a la hora de exigir al taller y pagarle sus trabajos", explica la directiva.

Escucha todo lo que nos ha contado Ana Ávila:

Asetra: Así será el 2025 para los talleres

Recibimos a Ana Ávila Bravo, Directora Corporativa de ASETRA, nos hace un balance del sector en 2024

Crisis de personal cualificado

Uno de los mayores retos que enfrenta el sector es la escasez de trabajadores especializados. "Se necesitan entre 15.000 y 20.000 profesionales a nivel nacional", señala Ávila, quien destaca que "los chicos y las chicas no quieren estudiar automoción" y reclama una actualización urgente de los ciclos formativos.

"Los ciclos formativos de automoción deben modernizarse. No recogen la actualidad de la movilidad y eso hace que los jóvenes no lo vean como un mundo atractivo", afirma la directora de Asetra.

Para este año, la asociación se ha marcado como objetivos principales mejorar el diálogo con las aseguradoras, dignificar la profesión y actualizar la formación profesional. "Vamos a iniciar conversaciones con todas las compañías aseguradoras porque queremos que vean que el taller tiene que vivir y cobrar por su trabajo lo que se merece", concluye Ávila.