El responsable de comunicación de Crédito y Caución, Pavel Gómez del Castillo, nos ha presentado su último Barómetro de Prácticas de Pago 2023 y, entre las conclusiones, destaca que las empresas norteamericanas se encuentran en alerta por el aumento de la morosidad que están sufriendo.
Una región que incluye Canadá, Estados Unidos y México. Señala que la preocupación por el impago es similar a la que tienen las empresas por la inflación o por el incremento de costes, apunta Gómez del Castillo. Reconoce que les implica dedicar muchos recursos a estos controles.
En el caso de los EEUU y Canadá solo se pagan en plazo poco más del 30% de las facturas. En el caso de México ha mejorado y son casi la mitad. El mayor empeoramiento se produce en Canadá con un recorte del 15% respecto al año pasado.
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El responsable de comunicación de Crédito y Caución, Pavel Gómez del Castillo, nos ha presentado su último Barómetro de Prácticas de Pago 2023 sobre la morosidad en esta región.
La morosidad crece a dos dígitos
De acuerdo con el último Barómetro de Prácticas de Pago 2023 la principal preocupación de las empresas en la región T-MEC (Estados Unidos, Canadá y México) es el deterioro significativo del comportamiento en pagos de sus clientes B2B asociado al potencial impacto negativo en su liquidez y flujos de caja.
Los niveles medios de morosidad de la región crecieron una media del 13% con respecto a 2022, destacando el incremento del 30% en Canadá. El nivel de impagos incobrables también mostró una tendencia al alza en Estados Unidos y Canadá, lo que ha impulsado a las empresas de todos los sectores a aplicar medidas contundentes para mitigar el impacto del riesgo de crédito de los clientes en medio de un entorno económico difícil.
La mayoría de las empresas de la región T-MEC dedicaron más tiempo y recursos al recobro de facturas impagadas, reforzando los procedimientos internos de control del crédito. La duración de los plazos de pago concedidos a sus clientes B2B se ha vuelto más estricta.
También se registra un descenso en el nivel de ventas a crédito B2B como protección contra los déficits de liquidez. Debido al incremento de los tipos de interés, la mayoría de las empresas en busca de financiación externa prefieren endeudarse a través del crédito comercial en lugar de recurrir a préstamos bancarios, más costosos.
Los efectos persistentes de la inflación y la incertidumbre que rodea a la volatilidad de los precios de la energía y las materias primas son otras de las principales preocupaciones de las empresas de la región de cara a los próximos meses.
El tejido productivo se muestra preocupado por el aumento de sus costes directos, el efecto dominó en otros sectores y las dinámicas de la cadena de suministro. Junto a estas preocupaciones, las empresas también se muestran afectadas por la escasez de liquidez debido a los posibles déficits de tesorería derivados de la morosidad en el comercio B2B. A pesar de este contexto, las empresas norteamericanas son optimistas de cara al futuro.