El Tesoro Público reduce a 40.000 millones de euros la emisión neta en 2018, lo que supone una reducción del 11% frente a 2017. Según la estrategia de 2018, la emisión bruta será inferior a la del año anterior y ascenderá a 220.145 millones, de los que 126.310 serán a medio y largo plazo.
Los objetivos del Tesoro para el nuevo año vuelven a ser el incremento de la vida media de la deuda, la reducción de costes y la diversificación de la base de inversores, “en un contexto de recuperación económica en Europa y ante la previsible normalización gradual de la política monetaria en la zona euro”. En este escenario de futuras subidas de los tipos de interés habrá un repunte a medio plazo en los costes de financiación y ya en los primeros días del año se ha observado un incremento en las rentabilidades de la deuda pública española, con un interés del bono a diez años que ha subido incluso al 1,6%.
El Ministerio de Economía explica que estos objetivos parten del “cumplimiento exitoso de la estrategia fijada en 2017”, aunque la financiación neta final del año fue superior a lo pronosticado inicialmente, hasta 45.031 millones de euros, tras incluir los 10.192 millones del préstamo otorgado a la Seguridad Social. Economía puntualiza que este préstamo no se tradujo en un aumento del déficit fiscal ni de la ratio deuda/PIB, que se ha situado en la recta final de 2017 en un 98,7% del PIB.
El coste medio de las emisiones durante el año pasado se ha mantenido cerca de mínimos históricos, al aumentar un punto básico, hasta el 0,62%. El coste de la deuda en circulación se ha reducido hasta el 2,55% al cierre de año, “la cifra más baja de la historia reciente del Tesoro”. Además, “el continuado descenso del coste medio, gracias al mantenimiento de la confianza en España por parte de los inversores, ha permitido la reducción de la carga financiera en términos de Contabilidad Nacional en un 12% desde el máximo alcanzado en 2014, lo que ha supuesto un ahorro de 3.567 millones de euros”. A su vez, la carga de intereses ha caído un 8,8% respecto al presupuesto en 2017, lo que se traduce en un ahorro de 2.493 millones.