Los mercados de Asia han cotizado en tono rojo durante esta sesión con Japón encabezando las pérdidas. Australia ha caído a un mínimo de cuatro meses, ya que, los inversores han acudido a los activos refugio en medio de las preocupaciones acerca de las elecciones estadounidenses.
El Nikkei de Tokio ha cerrado (-1,57%). En el mercado de divisas un yen más fuerte ha empujado a los principales exportadores del país, con Toyota ha caído un 4,4%, Sony un 3,6% y Mazda ha descendido más de un 6%. Hay que destacar los títulos de Takata han bajado un 4% después de que el diario Nikkei haya publicado que la japonesa esté considerando declararse en suspensión de pagos en EEUU. Según fuentes del diario Nikkei, de esta manera podría conseguir tiempo para negociar los costes de las llamadas a revisión de sus productos. Sus acciones han sido suspendidas de cotización durante unos minutos pero ya vuelven a operar con normalidad.
En el foco de esta jornada ha seguido el sector financiero australiano. Los llamados “cuatro grandes bancos” australianos han negociado a la baja. El National Bank of Australia ha caído un 6%. Y en el lado de las subidas, el fabricante de explosivos Orica ha repuntado un 8% después de publicar sus resultados empresariales. El beneficio neto antes de impuestos ha sido de 299 millones de dólares.
Los mercados chinos han sido los que han roto esta tendencia aunque de manera suave. Shanghai ha cerrado (+0,03%) y Shenzhen (-0, 06%).
Por cierto que la china Huawei ha lanzado su nuevo Mate 9, un teléfono inteligente de 5,9 pulgadas que ha sido presentado en Munich. El nuevo Smartphone de la china intenta llenar el hueco del Samsung Note 7. Para curarse en salud, Huawei ha subido la batería, de esta manera se pueden ver 20 horas de vídeo, realizar 20 horas de navegación 4G y 105 horas de música ininterrumpida. El sistema de carga rápida permite carga completa en 20 minutos. Sus títulos apenas experimentan movimientos, han cotizado con recortes del 0,3%.